Mujeres de El Cairo: La dignidad femenina al descubierto

TitularEn pleno periodo estival llega a España Mujeres de El Cairo que representa una parte de la realidad social egipcia a través de una afamada y bella presentadora, Hebba (Mona Zakki), que en su programa ataca a la clase política del país. Su pareja, Karim (Hassan El Raddad), también periodista, se encuentra con una oferta, por decirlo de alguna manera, para dirigir un prestigioso periódico nacional; pero este ofrecimiento conlleva una pequeña obligación: que Karim convenza a Hebba para cambiar la temática política de sus programas. Por amor Hebba dejará de atacar al poder para centrarse en lo social que, por realidad, está impregnado de un claro trasfondo político. En este contexto Hebba cruzará historias sobre mujeres traumatizadas por un pasado en el que los hombres y las relaciones con el poder han marcado el duro presente de la mujer en Egipto del que Hebba acabará siendo protagonista. Con todo esto, Mujeres de El Cairo se convierte en un destello de una sociedad en la que las mujeres no gozan del respeto merecido ante la falta de oportunidades y la falsedad social con una transformación de los roles que convierten al hombre en el objeto de deseo.

TitularEsta pieza coral que refleja algo de aperturismo en Egipto es la primera película en la que Yousry Nasrallah (El acuario, 2008) no escribe el guión que dirige, en parte, porque la obra ha sido concebida por el afamado Waheed Hamed, una estrella de lo social en las fronteras de los antiguos faraones. Sin lujos ni excesos en la dirección, pero con una lograda puesta en escena, nos llega una película que sigue el clásico tratamiento de los textos Waheed Hamed: secuencias dramáticas alargadas. Si los 180 minutos de El edificio Yacoubian (2006) parecen excesivos, aquí sucede lo mismo con más de dos horas de imágenes. Eso sí, mantiene lo social que caracteriza el cine de Hamed. No todo es cierto, pero sí real. Por ejemplo, la historia de las tres hermanas empresarias que se enamoraron del mismo chico fue publicada en primera plana de los periódicos. Personajes rebeldes que integran una sociedad un tanto retrograda en donde la expresión libre es vista con lupa por las altas esferas políticas.

Repleta de ilusión nos llega esta cinta que ha sido proyectada en los festivales de Venecia y Toronto, y que se convierte en la segunda película egipcia que llega a nuestras pantallas en una década. La anterior, El edificio Yacoubian, con sólo dos copias a nivel nacional y en versión original, dio buenos resultados al mantenerse más de un mes en los cines Golem de Madrid. Veremos si Mujeres de El Cairo sigue la misma fortuna y así las distribuidoras se lanzan a importar estos productos que se muestran diferentes, en muchos sentidos, a los bombardeados desde Hollywood.

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