Batman #37

Batman #35-37: ¡Vaya lío!

Batman #35«¿Crees que meterle ahí es buena idea?«

 

Interesante terna de entregas la que nos toca reseñar hoy. Casi no nos ha dado tiempo a recuperarnos de la excelente Origen y Scott Snyder y Greg Capullo ya nos tienen preparada una nueva saga del Caballero Oscuro que promete no dejar títere con cabeza. Así es, tras un Batman #35 de transición que sirve para arrojar unas cuantas pistas y concluir la hermosamente dibujada primera saga de Francis Manapul y Brian Buccellato al frente de Detective Comics, el dúo creativo más estable en la DC actual decide llevar a Batman a un nuevo límite… quién sabe si no el último y definitivo.

 

Pero vayamos por parte porque los tres números tienen chicha. Como he dicho, la trigésimo quinta entrega de las aventuras de Bruce Wayne comienza con una historia autoconclusiva, de las que se pueden considerar «de transición» en la que descansan Snyder y Capullo (los reemplazan Gerry Duggan, del que hemos hablado recientemente por su aportación a las aventuras del nuevo Nova de Marvel y Matteo Scalera, a quien quizás recordéis de Dead Body Road). Sin embargo en El Manso, hay bastante más para escarbar de lo que parece a primera vista. El villano, un asesino en serie obsesionado con el anonimato, se contrapone a la extensa galería de lunáticos a la que se ha ido enfrentando el murciélago y nos hace reflexionar de nuevo, como ya ocurriera con el Tribunal de los Búhos, acerca de esa siniestra cara oculta de Gotham que no conocemos y que llena de muerte y llantos las calles bajo las mismísimas narices del justiciero enmascarado que la protege. La resolución del capítulo no es alegre, no puede serlo cuando tanta gente ha muerto hasta que Batman ha tomado consciencia del asunto, pero tiene el clásico aroma a revancha que caracteriza al héroe y que, por sorprendente que parezca nos lanza de cabeza a la saga que se avecina.

 

«Me has roto la puñetera nariz«

 

La conclusión de Ícaro no es mucho más alegre de lo que vemos en la cabecera principal del hombre murciélago. Con una explosión, tanto Batman como Bullock toman consciencia del verdadero enemigo al que se enfrentan y esto hace que las cosas se precipiten hacia un violento desenlace que deja demasiados cabos sueltos como para pensar, aunque ambos creativos se tomen un respiro de dos números, que hasta aquí han llegado sus aventuras al frente de la colección que mejor explora el universo y las características del viejo héroe de DC. El personaje de Annie abandona la ciudad, pero deja muchas historias por contar y carga a cuestas con un crimen que quizás la obligue a regresar a la ciudad que acabó con la vida de su madre antes de lo que ella misma sospecha.

 

Batman #35

Conclusión de Ícaro en Batman #35

 

Pero lo que convierte al tomo #35 en meramente transitorio es el propio Batman #36 que, por aquello de volver por todo lo alto tras el largo flashback de Origen y la introspección, que la hay, de Batman Eterno, lanza a lo más granado de la Liga de la Justicia sobre el Caballero Oscuro, que ha de sobrevivir como puede a una batalla en la que no puede vencer de ningún modo. Un momento… ¿después de Batman Eterno? ¡Pero si aún vamos por la octava entrega de la colección!

 

Pues sí chavales, en un movimiento un tanto extraño por parte de DC (ECC se ha limitado a conservar su periodicidad, lo he comprobado), cuando absolutamente todo estaba en el aire en la colección semanal del justiciero, se publicaron en Estados Unidos Batman Eternal #33 y Batman #35 (primera parte de Final del Juego y continuación directa de lo ocurrido en la serie coral). Ya de primeras, vemos un par de spoilers importantes con respecto a lo que estamos viviendo en Batman Eterno (¿de qué sirve terminar el octavo tomo de Batman Eterno de una forma tan tensa si te cargas la tensión con la siguiente grapa de Batman?). En cualquier caso ECC aquí tenía todas las facilidades para haber esquivado el problema gracias a su considerable distancia con la edición norteamericana (estos números son de octubre de 2014), le habría bastado quizás con centrarse temporalmente en Detective Comics (¿qué tal concentrar Terminal en una sola entrega?) para dejar que Batman Eterno contase lo que tenía que contar sin interferencias de ningún tipo. Oportunidad desaprovechada.

 

«¡Bienvenidos a Gotham!«

 

En cualquier caso, esto no hace de Batman #36 un volumen menos espectacular. Todo el primer capítulo de Final del Juego es una oportunidad para que Batman se luzca de la mejor manera que sabe. Wonder Woman, Aquaman, FlashBruce Wayne se ha preparado para luchar contra todos y cada uno de los integrantes de la Liga, es to es algo que siempre hemos sabido, pero pocas veces tenemos la oportunidad de comprobar hasta qué punto un hombre sin poderes es capaz de luchar de igual a igual con algunos de los seres más poderosos del planeta. Snyder y Capullo se divierten de lo lindo en este primer capítulo, rico en viñetas de pura acción y con una conclusión que vuelve a arrojarnos a las garras de la némesis de nuestro protagonista.

 

Batman #36

Superman en Batman #36

 

Y ojo, que a partir de ahora los números de la principal cabecera del Caballero Oscuro en España van a venir cargaditos. Al capítulo mensual de Final del Juego se viene a sumar una mini-historia sobre el Príncipe Payaso del crimen protagonizada por una de las doctoras del psiquiátrico Arkham y varios de sus internos fugados. Estos breves relatos, con un nexo común pero independientes entre sí, van a estar relatados por el fiel escudero de Snyder, James Tynion IV, y una importante galería de artistas de los que, en los números #36 y #37 tenemos ocasión de disfrutar a nada menos que Kelley Jones (famoso por su colaboración con Neil Gaiman en Sandman y por el siniestro Batman que concibió junto a Doug Moench y que ECC ha recopilado en su línea de Grandes Autores de Batman) y Graham Nolan (sin relación con los cineastas, pero con un largo pasado al lado de Batman).

 

«Estoy en medio de un asunto«

 

Como ya es costumbre, cada número de la colección cerrará con su correspondiente entrega de Detective Comics que, permitiendo el antes mencionado descanso del dúo Manapul/Buccellato, cede en esta ocasión protagonismo a Benjamin Percy (conocido escritor norteamericano de revistas como Squire y autor de cierto número de novelas) y John Paul Leon (conocido por sus dibujos en Static y Tierra X) que nos cuentan una historia de terrorismo y aeropuertos aún de moda pese a todos los años que han pasado desde el 11S. Terminal se trata de una historia seria y de fácil lectura que no nos distrae de lo que Scott Snyder y Greg Capullo nos pretenden contar en la que se promete como la saga final de toda una etapa para el cruzado de Gotham.

 

Batman #36

Terminal, de Percy y Leon en Batman #36

 

En Batman #37 de repente la breve historia que Duggan y Scalera de la que hemos hablado al principio de este artículo cobra sentido cuando Batman regresa a la desmoronada celda 801 del derruido Asilo Arkham en busca de respuestas. La sorpresa que Snyder nos tiene reservada para este número me maravilla porque es de esas que el autor lleva cocinando desde hace un buen montón de números (concretamente desde el número #23 de la colección, el segundo Anual escrito cuando Origen comenzaba a despegar)… Quizás merece la pena releer las apariciones del buenazo de Eric Border para comenzar a ver al personaje con otros ojos (si os da pereza la gente de Bleeding Cool ya lo ha hecho por vosotros).

 

Batman #37

El Joker regresa en Batman #37

 

Final del Juego promete ser otra ocasión (quizás la última) para que Snyder y Capullo sigan rompiendo los esquemas preestablecidos que tenemos acerca del Caballero Oscuro. En esta ocasión el dúo creativo sube la apuesta al dejar al mundo desprotegido de cualquier amenaza y a Batman como espectador impotente de la última broma asesina del Joker. Los próximos meses se antojan de lo más interesante. ¿No creéis?

Acerca de RJ Prous

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En la soledad de mi beca Séneca en Zaragoza aprendí a amar el cine mierder. Volví a Madrid para deambular por millones de salas y pases de películas para finalmente acabar trabajando con aviones. Amante del cine y de sus butacas, también leo muchos cómics y, a veces, hasta sé de lo que hablo.

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