«Puede que deba ser más directo«

Cubrimos esta vez seis meses de la publicación que está haciendo ECC de la estupenda etapa de Bryan Hitch y Fernando Pasarín al frente de la Liga de la Justicia. En la última entrega dejamos al equipo desperdigado por diferentes momentos de la historia de su Tierra y ahí es donde les recogemos hoy, para a continuación lanzarles a una serie de aventuras que, poco a poco, les acercan a una gran amenaza que aún está por llegar.

Un denominador común (y mira que lo dejé caer en mi anterior artículo) va a ser el tema de los viajes temporales. Cuatro de los seis cómics que nos ocupan tratan este tema de un modo u otro, lo cual nos hace pensar dos cosas: la primera (que ya comenté) es que Hitch tiene una obsesión con esta temática, la otra es que distintos personajes (héroes y villanos) están tratando de acceder al presente por tratarse de un momento crítico antes de un gran cataclismo (¿se referirán a Noches Oscuras: Metal? ¿a los acontecimientos de La Chapa?). En cualquiera de los casos, el guionista está aprovechando esta relativamente tranquila etapa para forjar verdaderos vínculos entre los personajes, algo que cualquier lector le debería estar agradeciendo al guionista. Más aún en una época en la que las prisas han enterrado esta buena praxis.

«Ya es tarde. No podéis evitarlo«

Comenzamos, como decía, por las dos partes que quedaban para cerrar Intemporales. Lo que comenzó como una manera algo caótica de recuperar el edificio de Infinity evoluciona para convertirse en algo de implicaciones mucho más profundas. Los enemigos de la Liga en este arco no son villanos al uso (ni tan siquiera tras el ‘girito‘ argumental del final), sino que tienen un objetivo noble a través de unos métodos del todo censurables. Me recuerdan a la Cábala de villanos que se formó en el universo Marvel justo antes de las Secret Wars. Un grupo de personajes que velan por la integridad del universo a costa de arrasar con todo lo que amenace esta finalidad.

Liga de la Justicia: Renacimiento #11

No es la primera vez que vemos como la Tierra se constituye como el centro de todos los males y las amenazas del universo. Me parece que es una corriente reciente tratar de explicar en términos de geocentrismo el porqué de todos estos sucesos terráqueos y, si bien, es interesante que haya gente detrás haciéndose estas preguntas, me gusta más la hipótesis japonesa (que hemos podido ver hace poco en Dragon Ball Super) de que no es que en la Tierra pase todo, sino que las mismas historias se repiten a la vez en distintas partes del universo (y del multiverso).

«No pienso verte morir otra vez«

Saltamos en Liga de la Justicia: Renacimiento #12 a una historia de bucles temporales a lo Día de la Marmota (lo siento Dani, lo dice el propio Flash). No os pienso engañar, se trata de una historia de transición hecha a medida para que los lectores nos divirtamos y, aquí vuelvo con lo que decía al principio del artículo, para fortalecer los vínculos entre los integrantes del equipo. Barry Allen, como no podía ser de otro modo, será el protagonista de esta historia. Divertido de leer e intrascendente a largo plazo. Pero también tiene que haber de estos cómics. Hitch, por cierto, vuelve a ejercer de autor completo en este número doble.

Liga de la Justicia: Renacimiento #13

A continuación se toma el guionista un descanso que aprovechan Shea Fontana y Tom DeFalco para escribir dos capítulos centrados en el complejo personaje de Jessica Cruz. Para los rezagados, aclararé que esta Green Lantern obtuvo su anillo a partir del que se dejó en la Tierra la contrapartida timorata de Hal Jordan en Tierra-3 durante los sucesos de Maldad Eterna. No sólo eso, sino que Cruz padece de agorafobia y el anillo la eligió por ser capaz de vencer a un gran miedo: concretamente el de salir a la calle. Al personaje lo hemos visto más tiempo desvinculado del grupo que trabajando con ellos debido al bajo concepto que tiene de sí misma y sus habilidades. Estas dos historias sirven para fortalecer el autoconcepto del personaje y mejorar su relación con un caracter tan poderoso como el de Wonder Woman. Una idea excelente y bastante bien ejecutada, todo sea dicho. Se ocupan del dibujo Philippe Briones, primero, y Tom Derenick, en el segundo capítulo.

«No puedo volver a casa«

Siguiendo la estela de grapas dedicadas a un personaje, Liga de la Justicia: Renacimiento #14 sirve para introducir a Mera (mujer de Aquaman) en el grupo mientras ésta se ve arrancada de su país y su esposo se encuentra preso por aquellos mismos que lo han derrocado como rey de Atlantis. También sirve para dar un impulso a los personajes de Cíborg y Simon Baz en una historia que, ahora sí, vuelve a tocar el tema de la amenaza que se cierne sobre el universo que protegen nuestros héroes. La conversación entre Batman y su interlocutora no tiene desperdicio alguno y, sea cual sea esta amenaza, me quito el sombrero ante la manera en que Hitch está sembrando el hype.

Liga de la Justicia: Renacimiento #15

Cerramos el semestre con la primera parte de Legado, una historia de la que todavía sabemos muy poco y de la cual lo único que puedo comentar (aparte de las muchas preguntas que tengo) es lo mucho que me flipan los diseños de Fernando Pasarín para los nuevos personajes que en ella aparecen. Son una auténtica pasada y me va a dar pena que se queden en unas meras estrellas invitadas de esta serie para luego perderse en las sombras de los proyectos que nunca se realizaron. De nuevo, por supuesto, hablamos de viajes en el tiempo, aunque una sombra de duda me corroe desde el primer instante de esta historia. Veremos en qué desemboca.