Miguel Larraya

Miguel Larraya: «Estamos en mitad del huracán respecto a la industria»

¿Quién mejor que un cineasta que está empezando para hablar de la situación actual del cine? No es nuevo en este oficio, Miguel Larraya ya hizo Afterparty en 2013 y un par de cortos. Con él hablamos de Todo el mundo lo sabe, ganadora en el festival de Málaga de la sección Zonacine, que se forjó dentro del modo de producción #littlesecretfilm. Además de su proyecto, en esos días de festival ha habido tiempo para hablar de la situación actual de la industria.

 

Miguel Larraya

 

P: ¿Cómo surge esta idea?
R: A partir de la propuesta de Haizea Viana y Pablo Maqueda –los creadores de #littlesecretfilm- yo pienso un concepto que se pueda hacer dentro de esa estructura. Sí que me apetecía hacer una película relacionada sobre la corrupción actual en España. A mí me gustan mucho las pelis de espías, por eso decidí que fuera una película articulada en el sonido, a raíz de las escuchas, que va creciendo en imagen para que no sea muy monótona y no crear una narrativa que fueran sólo bustos parlantes. Pensé que ahí había algo y lo enlacé con el cine de espías y lo toco con personajes que he ido detectando en las noticias pero muy en la periferia, no los protagonistas, sino los que a veces se mencionan (alguien que ha sido compañero de celda de alguien que sale y habla del tipo en cuestión, o un amante de alguien) y no son los personajes principales pero yo ahí encuentro un hilo conductor y tiro por ahí.

 

P: Ha sido un rodaje corto, ¿Pero cuánto te ha llevado hacer el guion?
R: Estuve mucho tiempo escribiendo. Creo que además es fundamental tener tiempo para reposar las ideas. Crecen en la cabeza, lo relees. No había un guion cerrado pero el tratamiento con el que rodamos que eran unos 35 folios. Esos los tuve en dos meses, pero reescribiendo sí que estuve unos seis con pequeños toques, quitando cosas, poniendo, y es casi para mí lo más importante. Ambas partes importan, no hay que conformarse con lo que sale en el primer borrador porque está demasiado verde. Está bien tener tiempo y que la historia repose.

 
P: ¿Tenías algún referente principal dentro del cine de espías?
R: Esta película tiene algo que ver con el reverso de La conversación de Coppola. Esa es una peli sobre el que escucha, y ésta es una peli sobre los escuchados. Coppola en su película también hace un ejercicio del sonido muy importante cuando oye las cintas: esos insertos cada vez más nítidos y que se muestra cada vez más nítida la imagen y la escucha según él va entendiendo que es lo que ha ocurrido.

 

P: Esta película ha nacido dentro del formato #littlesecretfilm. Las películas han nacido para que se proyecte en salas, pero las nuevas propuestas hacen que, como Todo el mundo lo sabe, tengan otra vía diferente.
R: Bueno, esta película tuvo un par de primeros pases en salas en el Matadero; pero sí, son sólo dos pases. Tengo la sensación de que todavía estamos intentando configurar qué hacer con este cine. Me da que estamos en mitad del huracán todavía intentando buscar, y me gustaría que después de esta vorágine, encontrásemos una forma. Pero cada una de las películas de #littlesecretfilm ha tenido una vida muy distinta. Creo que estamos todos intentando todos buscarnos la vida e intentando una nueva forma de hacerlo. Al final lo que tendrá que ocurrir será un modelo mixto, donde no se pierda la gran pantalla pero que lleguemos a las pantallas pequeñas, sobre todo porque las grandes son caras de mantener, y es difícil hoy en día sostener un cine y proyectar películas que no tengan una rentabilidad tan clara. El modelo mixto es el más interesante, pero creo que no tenemos mucha idea aún. Estamos investigando: uno prueba, ves que a otro le ha salido bien la parte. Yo no sé qué voy a hacer con la película aún después de Málaga, mandarla a más festivales ¿y después? Sé que al final la pondré en algún lado donde la gente la pueda ver, pero no sé si será gratis o en qué plataforma.

 

P: Así que es verdad, es difícil ser director de cine en España es difícil…
R: Uf… Sí. No recuerdo quién decía eso de “ser director de cine es España es como querer ser torero en Finlandia”. No es tanto como eso, pero casi.

 

Juan Blanco y Diego Toucedo en "Todo el mundo lo sabe"

 

P: Ahora la idea presente es decir que el cine español está enfermo ¿Qué opinas tú de la situación?
R: Yo empecé a leer sobre cine muy joven y es cierto que siempre se ha hablado sobre crisis de cine español. Nunca he oído decir que el cine español va de puta madre. Y yo me suscribí a una revista de cine con quince años, y ya se hablaba del tema. Estamos en un país donde la cultura no está muy enraizada en la sociedad, o en toda, y eso al final siempre lo hace complejo. Si estuviéramos en un país donde la cultura se valorase a pie de calle más, todo fluiría de una forma más fácil de sostener. No creo que esté enfermo, sino que en este país no está establecido. Pero dentro de esta situación, fluctúa, y que a veces hay un año que está mejor, otros peor, pero nunca está bien del todo.

 

P: Pero justo ahora, están saliendo nuevos directores…
R: Es verdad que hay una atención a una nueva generación de directores. Creo que es algo que en la historia de los países ocurre mucho. Parece una pescadilla que se muerde la cola: No sabes si es una generación entera, o el hecho de que aparezca uno hace que todo el mundo empiece a mirar a esa generación, cuando antes podía haber habido otras de las que se han pasado. Pero ha ocurrido y ocurre en ese círculo, donde también creo que nos estimulamos unos a otros: ves Stockholm o ves Diamond flash y dices: jo, se puede hacer cosas guays, y te motivas tú mismo, piensas, yo también voy a intentarlo. Es interesante y creo que está ocurriendo de verdad. Ojalá que haya un paso más, que sea que encontremos a un público que sea afín a esa generación. Sería muy interesante que ocurriese lo que ocurrió con la música indie, que aparecieron unos grupos y crearon un público, y al final se han convertido en mainstream. De eso no nos tenemos que olvidar: está guay que surja una generación, pero también debe surgir una generación de espectadores que se interese, e igual que digan “Cómo molan los Planetas”, digan también “Cómo mola Vermut”. En los noventa eso ocurrió con Medem, Bajo Ulloa, incluso un poco más tarde con Fernando León. Era un nuevo cine que había que ir a ver y ojalá que ocurra ahora.

 

P: Y otra parte son los actores. Si ahora te da a elegir entre actores españoles, ¿A quién escogerías?
R: Pues hay uno que es con el que hice mis primeros cortos, que es Ginés García Millán, que me encanta como actor. Trabajé con él cuando tenía 25 años, fue un rodaje maravilloso y le estoy súper agradecido. Es un corto que con todos los defectos de juventud me parece muy buen ejercicio, y me encantaría volver a trabajar con él. Aparte me gusta mucho Bárbara Lennie como actriz, me encantaría hacer algo con ella algún día.

 

P: ¿Qué futuro tiene esta película para proyectarse?
R: Creo que en salas estará complicado. Habiéndose visto en Calle 13 es difícil, pero sí me gustaría llevarla a más festivales a nivel internacional, quiero que la película viaje. Después de eso no lo tengo claro, pero sí que me gustaría que estuviera accesible a la gente. Nuestro objetivo con ella es que se vea el trabajo no tanto como tener un retorno económico. Darle la mayor proyección posible.

 

P: ¿Hay ya proyectos futuros, dentro o fuera de #littlesecretfilm?
R: Yo quiero profesionalizar mi actividad en el cine, me gustaría vivir de ello, o por lo menos por épocas. Eso requiere que la película pase por un formato convencional, con una financiación y una distribución en salas. Ahora estoy escribiendo un proyecto con ese esquema en mente. Sé que si se prolonga o se dificulta mucho que eso ocurra, yo he quedado lo suficientemente contento con el resultado de esta película como para volver a abordar algo así, y pasado un tiempo quizá les pueda pedir de nuevo los favores a la gente y que a la gente le vuelva a apetecer “pringarse” a hacer algo que no se puede hacer en los esquemas habituales. Aunque la mentalidad es hacer algo por lo que nos paguen y por lo que podamos dedicarle el tiempo, ya no por el dinero en sí. Soy muy defensor de la profesionalización de las cosas, y pienso que con tiempo se consiguen mejores resultados.

Acerca de María Aller

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Madrileña. Comunicadora. Periodista. Sagitaria. Bonne Vivante. Cine. Y festivales, series, libros, cocina, deporte... recomiéndame!

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