Lobezno MAX: Ira Permanente

Lobezno MAX. Ira Permanente: A ver si aprendes Hollywood

Lobezno MAX: Ira Permanente«Vive entre millones de personas a las que no les importas una mierda«

 

Lobezno, al igual que Shrek, es como una cebolla. Cientos de capas se han ido superponiendo a lo largo de los siglos alrededor de este mutante prácticamente inmortal y atormentado. Verle ahora al frente del Instituto Jean Grey y liderando (hasta hace relativamente poco) al comando asesino X-Force a la vez no resulta tan inverosímil si analizamos el pasado de Logan desde el siglo XIX y hasta la actualidad. Sin embargo, hay una constante en el carácter de este personaje más allá de lo que su corazón le lleve a hacer en cada momento: Lobezno es un tipo resolutivo como pocos. ¿Que la Bruja Escarlata se ha vuelto loca y podría destruir la realidad? Matémosla. ¿Qué Jean Grey está poseída por una entidad cósmica destructora? Hay amores que matan. ¿Qué Apocalipsis se ha reencarnado en un crío…? Bueno, lo vais pillando.

 

Visto lo visto, resulta chocante ver a Hugh Jackman interpretando a un Lobezno que cumple con creces cuando juega en equipo y titubea como una colegiala cuando se queda a solas. X-Men: Orígenes fue un puñetazo en el estómago y la reciente Lobezno Inmortal no ha mejorado demasiado la imagen del mutante en la gran pantalla. Un Logan lloroso y zarandeado de amor en amor no es lo que cualquiera esperaría cuando se dirige al cine a ver a un tipo que primero destripa y luego pregunta.

 

Es quizás por todo esto que la nueva colección de Marvel que trae Panini llega en el momento justo para «lavar» la imagen de Logan y, ya de paso, mostrárnoslo con toda la crudeza que los cómics para adolescentes suelen disimular. Lobezno se une a la colección de contenidos adultos MAX a la que ya han honrado personajes como Punisher, Deadpool o Nick Furia para poder contarnos una historia madura, alejada de los artificios y que nos mantiene pegados al cómic de principio a fin.

 

«¿Cómo sé que no soy un asesino en masa?«

 

Ira Permanente nos pone en la piel de un Lobezno que despierta en medio del Pacífico tras un accidente de avión del que es el único superviviente. El siniestro le ha costado las dos piernas y sus recuerdos. ¿Quién es? ¿A dónde iba y por qué? A través de flashes que nos llevan a un lejano pasado vamos conociendo a un Logan algo distinto del que podemos ver en la continuidad principal, un nómada eterno en una continua búsqueda de una paz que le es siempre negada. Sin embargo, la gran ventaja de este Lobezno frente al cinematográfico es que ni la amnesia ni los recuerdos dolorosos frenan un solo momento a este héroe con corazón de samurái en su determinación por hallar respuestas y seguir avanzando con la mirada puesta siempre en el futuro.

 

Lobezno MAX: Ira Permanente

 

Jason Starr, el responsable de este proyecto, inició su andadura como novelista y varios de sus relatos han acabado en televisión (The Follower) e incluso hay rumores que hablan de una futura adaptación de su Panic Attack por parte de David Fincher al cine. En esta ocasión nos pone a rastrear en los bajos fondos del Japón actual una pista que se enfría rápidamente y que puede ser la clave de los recuerdos del protagonista. Además, un viejo «amigo» de Logan hace acto de presencia para torturar aún más la maltrecha mente del mutante. ¿De dónde vienen sus garras? ¿Acaso no pudo ser él quien provocara el accidente?

 

Starr se apoya en el dibujo del francés Roland Boschi (Lobezno y la Patrulla-X: Alfa y Omega) y el español Félix Ruiz (Marvel Zombies, Nuevos Mutantes). Entre los dos se encargan de dejar clara la diferencia entre el recuerdo y la acción presente y si me he de quedar con uno ése es Ruiz (lo siento Boschi, sigues sin conquistarme), cuyo estilo se mimetiza con lo que está contando Starr y con el dónde lo está contando. Prueba de su importancia en este cómic es que las secuencias pretéritas no logran la fuerza necesaria hasta el segundo capítulo de los cinco que componen este volumen (Ruiz entró sustituyendo a Connor Willumsen… y menos mal que lo hizo) Pero si el guión y el dibujo son buenos, las portadas (obra del artista británico Jock) son auténticas maravillas que merecen una segunda y una tercera mirada.

 

Panini ha traído una verdadera maravilla en forma de cómic para nuestro uso y disfrute. Vale, no es recomendada para menores, pero por algo es tan famosa la expresión de «placer adulto».

Acerca de RJ Prous

Avatar de RJ Prous

En la soledad de mi beca Séneca en Zaragoza aprendí a amar el cine mierder. Volví a Madrid para deambular por millones de salas y pases de películas para finalmente acabar trabajando con aviones. Amante del cine y de sus butacas, también leo muchos cómics y, a veces, hasta sé de lo que hablo.

Deja un comentario:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Artículos relacionados