Patsy Walker alias Gata Infernal

Patsy Walker alias Gata Infernal. Locos por una gata: Patsy busca su sitio

Patsy Walker alias Gata Infernal #1Antes de adentrarse en la caótica y divertida vida de Patsy Walker hay que hacer un ejercicio de abstracción, evitar hacer juicios de valor antes de tiempo o ir con ideas preconcebidas, y por supuesto, dejarse llevar por una propuesta que va a contracorriente de los cánones marvelitas más tradicionales. Y es que, en esta nueva andadura del personaje (a quien hemos visto versionada en la serie Jessica Jones de Netflix bajo el nombre de Patricia «Trish» Walker), la guionista Kate Leth ha buscado fusionar su estatus de heroína actual con sus orígenes románticos y costumbristas de la época Timely Comics, allá por los años 40.

 

Así, en esta colección editada en nuestro país por Panini Comics (y cuyo primer volumen toma por título Locos por una gata), la escritora intenta ir un paso más allá en esa cotidianeidad en la vida del héroe que lleva identificando a los personajes de la editorial desde tiempos de Spiderman o, para las generaciones más jóvenes, Ms. Marvel o Miles Morales. Aquí ya no hablamos de que el foco se divide entre la identidad civil y la justiciera del personaje, sino que la primera condiciona enteramente a la segunda. Patsy es una vigilante, sí, pero antes de eso tiene que pensar en cómo llegar a final de mes. Al fin y al cabo, poderes aparte, es una neoyorkina más.

 

El tono buscado para ello puede parecer muy bobalicón e ingenuo. Es cierto que estamos ante una colección pensada para un público muy específico (como pueden estarlo obras como Chica Luna y Dinosaurio Diabólico), y que se mueve en unos terrenos costumbristas, marginales dentro de los esquemas marvelitas, emparentándose con los personajes más estrafalarios de la editorial, ya sean Pato Howard o Chica Ardilla (ambos con su respectivo cameo en la colección). Pero también lo es que presenta los suficientes caramelos para captar el interés del lector medio (siempre y cuando se esté abierto a entrar en su propuesta, claro), como su propia premisa: la idea de Patsy de crear una agencia de empleo para gente con superpoderes que no quieran vivir angustiados por la eterna lucha entre héroes y villanos. O también el interesante juego que se establece entre la Patsy protagonista de la aventura y la Patsy personaje de cómic, y es que el pasado de la heroína como personaje de las antiguas historietas de Timely Comics está integrado dentro del relato, llevando el componente de metaficción y las disputas del mundo editorial a un lugar preponderante del relato.

 

Patsy Walker alias Gata Infernal

 

Secundarios recurrentes como Valquiria (con quien compartió equipo en Los Defensores durante una temporada) o Hulka hacen que no perdamos de vista que (como así sucede), en cualquier momento se desate el conflicto. Más discutible es la elección de las amenazas de este primer arco argumental, más enfocadas a la consecución de gags cómicos que a poner en verdaderos aprietos a Pasty, pero la promesa de lo que está por venir es otro de esos caramelos que comentábamos hace un momento. Tampoco deja de ser un primer volumen de acercamiento al personaje, de situarla en contexto y presentarla a ella y a su entorno. Esto conlleva que quizás el ritmo no fluya con la agilidad deseable. Leth construye el relato poco a poco a fin de conducirnos a una trama con más enjundia que, de momento, vemos en un segundo plano pero que puede dar lugar a divertidas situaciones (siempre que os gusten los culebrones).

Acerca de Daniel Lobato

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El padre de todos, pero como a Odín, se me suben constantemente a las barbas. Periodista de vocación cinéfila empecé en deportes (que tiene mucho de película) y ahora dejo semillitas en distintos medios online hablando de cine y cómics. También foteo de cuando en cuando y preparo proyectos audiovisuales.

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