«Me habéis seguido a una muerte segura«

Se acabaron las bromas y los chascarrillos. Jonathan Hickman da en este número el pistoletazo de salida a la debacle que se llevará por delante al Mundo de Batalla y a bastantes de las antiguas estructuras que sostenían al Universo Marvel para que en abril llegue a nuestro país ese nuevo y diferente territorio para explorar en el que todas las historias serán nuevas… aunque el primer crossover vuelva a ser una Guerra Civil superherorica.

Quizás sea porque es el primero (de tres cómics) que se mete de lleno en la guerra abierta a Muerte, pero lo que vemos en este número es una simple presentación de los diferentes bandos que se han formado a favor y en contra del regente de este vasto planeta. Y lo cierto es que, salvo honrosas excepciones, contemplamos como de nuevo héroes y villanos vuelven a colocarse donde sus alineamientos tradicionales les indican. Habría estado bien ver como los Inhumanos de Rayo Negro (¿o los Medusa?[SPOILER] ¿en qué iteración estamos?) defendían a su señor o como la Patrulla-X que vimos en Proyecto Exterminio se unía para acabar con la rebelión. Sin embargo son pocas las sorpresas en este primer compás del acto final y habremos de ver cómo va evolucionando la contienda y qué apoyos le quedan a Muerte al final de la misma.

«Es la verdad. ¡Y nos ha hecho pedazos!«

En cualquier caso, ¿de qué sirve sopesar los bandos cuando un simple gesto del dictador bastaría para acabar con la rebelión? Ya lo vimos al final de [SPOILER] El Ascenso de Attilan, y resulta incomprensible que Muerte, en su omnipotencia, no haya acabado ya con la guerra que amenaza con destruir lo que tanto le ha costado salvar. Pero, aunque creo que todavía tratará de realizar ese truco el villano del crossover, lo cierto es que Victor está acusando cada vez más la falta del Doctor Extraño. El sheriff de Mundo de Batalla le daba a su dirigente la suficiente perspectiva como para saber qué era peligroso y qué no lo era. ¿La presencia de Stephen habría evitado estos acontecimientos? Probablemente no (aunque sólo fuera por los remordimientos que lo atosigaban), pero con sus consejos y la sorprendente amistad nacida entre ellos, es muy posible que Muerte hubiera reaccionado de otra manera ante este levantamiento, dándole más oportunidades de salir victorioso y mantener unido si acaso un tiempo más el gigantesco planeta de retales que salvó de la muerte de la realidad.

Secret Wars #7

También en este número Hickman vuelve a los viejos malos hábitos y nos presenta algunas situaciones y escenas (como el desembarco de la turba de Hulks que preceden a este párrafo) que requieren la lectura de números de otras colecciones para su completo entendimiento. Pero también es cierto que desde el principio de este evento se nos indicó que habría varias series íntimamente ligadas con la principal (Thors, Inhumanos, Futuro Imperfecto…) y la verdad es que, al menos de momento, estas tramas secundarias sólo nos están sirviendo para comprender la elección de bando de tal o cual barón y es un hecho que el ejército de dioses del trueno al servicio de Muerte es una fuerza no sólo a tener en consideración, sino también merecedora de una historia propia que explique su posición en este conflicto.

Ya no queda casi nada (dos meses dado que Marvel ha tenido que alargar la historia durante un tomo más debido a la complejidad de lo relatado) y cuando todo esto de las Secret Wars termine lo vamos a echar mucho de menos. No sólo por la serie principal, que está siendo apasionante, sino porque Marvel ha creado un mundo y una amalgama de historias paralelas flipante e impulsora de la creatividad que está dando lugar a algunas de las mejores miniseries de los últimos tiempos. Para quitarse el sombrero.