Tras el impasse que supuso X-Men #28 con la recuperación de un relato de Chris Claremont, la mítica cabecera X-Men toma un nuevo rumbo con el que captar nuevos seguidores y, de paso, hacer un poco de justicia en este mundo post Vengadores Vs. Patrulla-X. Como ya apuntaba en el artículo dedicado a Capitana Marvel #1, apenas hay ejemplos de colecciones protagonizadas por féminas en la Marvel actual. Pero el lavado de cara de la editorial con Marvel Now! parece querer enmendar la situación y está abriendo un interesante abanico de series capitaneadas por las heroínas de la compañía. Así, a su adalid Carol Danvers y las X-Men que nos ocupan, en los próximos meses aterrizarán en nuestras estanterías títulos como Las Intrépidas Defensoras o las nuevas etapas de Imposibles X-Force o Hulka. Buenas nuevas para la salud del noveno arte y para la lucha por la igualdad.

Brian Wood, guionista de la serie, ha escogido a un carismático grupo de mutantes de donde se infiere un cierto sentido de continuidad con la etapa anterior (Tormenta sigue siendo la líder del equipo) y una intención de homenajear y recuperar el espíritu de los grandes patriarcas de la franquicia: John Byrne y Chris Claremont. Así, nos encontramos con Pícara, Kitty Pryde, Mariposa Mental, Rachel Grey y la citada Tormenta. Pero lejos de buscar una justificación artificiosa o tramposa que obligara a las heroínas a juntarse, Wood lo que hace es centrar el foco en ellas. Sin más. En el día a día del Instituto Jean Grey de Enseñanza Superior y en los conflictos a los que la Patrulla-X ha de hacer frente (también casi día a día) la atención se centra en las mujeres-X.

Con estas directrices, el desencadenante del primer arco argumental es la reaparición de Júbilo (que llevaba algún tiempo alejada de la primera línea) con un bebé huérfano al que ha recogido en Bulgaria mientras huye de un misterioso personaje (del que conocemos su identidad a mitad del capítulo) que va tras sus pasos. Si este primer número es un reflejo de lo que nos va a ofrecer Brian Wood, podemos esperar un buen puñado de aventuras contra amenazas de ciencia ficción. Suena bien, ¿verdad? Al tratarse de un arranque de saga y colección, el interés del guionista está sobre todo dedicado a presentar a los personajes y la configuración del grupo, por lo que para el lector menos familiarizado con las vidas de nuestras protagonistas, el desarrollo puede hacérsele algo lento.

En cuanto al dibujo de Olivier Coipiel, sin llegar al nivel ofrecido en las páginas del Thor de Stracynski, sigue haciendo un trabajo estupendo definiendo a los personajes y componiendo las viñetas. Todo un seguro aún cuando no está al 100%

Las X-Men de Brian Wood tienen el potencial para convertirse en uno de los referentes del nuevo cosmos marvelita. Una serie que puede interpretarse, además, en clave de homenaje a todas las mujeres mutantes.