Ha pasado mucho, muchísimo tiempo desde que Planeta Cómics sacara el primer volumen de las clásicas aventuras de Vampirella ilustradas por ese mito de la historieta patria llamado Pepe González. Pero por fin tenemos en nuestras manos este segundo volumen de una obra cuyo mayor propósito es rendir homenaje al dibujante español y acercar su arte a nuevas generaciones de lectores.

Este volumen recopilatorio sigue la historia en donde se quedó el anterior, con Vampirella luchando contra sus instintos sanguinolentos potenciados por las malas artes de sus enemigos, y aliados como Pendragón abatidos por la culpa y sus insanos vicios. Esta Vampirella nos revela una forma de contar historias que parece haberse perdido por culpa de la corrección política. Que no nos engañe la supuesta ingenuidad de algunas de sus aventuras, los temas que explora, y lo perverso del tratamiento de los mismos, le aporta muchísima fuerza al personaje. Hecho que debería servir como reclamo suficiente para darle una oportunidad a la lectura, a pesar de que su estructura narrativa (con extensos cuadros de texto descriptivos que a día de hoy resultan redundantes e incluso molestos) haya quedado bastante anticuada.

Esta Vampirella clásica nos ofrece unas aventuras que transitan entre el terror y la fantasía, con un componente social bastante más marcado de lo que podría parecer, y aunque (como suele suceder en todos los recopilatorios) presenta algunas irregularidades en cuanto a los relatos incluidos, ofrece una visión más o menos general de lo que era el personaje y lo que significó para la época. Y llegados a nuestros días, sigue sin haber un artista que se haya acercado a la concepción de Vampirella que ilustró Pepe González.