Si echamos la vista atrás  este verano hemos comenzado con una película de campamentos estivales que sirvió de carta de presentación para Bill Murray, después le tocó el turno a unos adolescentes salidos con ganas de pillar cacho y cómo se lo montan en su tiempo libre, lo cual, no nos engañemos, es el principal pasatiempo veraniego de muchos de nosotros.

Pero ahora llega Septiembre y con septiembre llegan los siempre temidos exámenes para cientos de universitarios. Así que he querido traeros una película de 1978 que nos da unas pautas de cómo debería ser la Universidad, por lo menos para gente con la mentalidad de Homer Simpson:

Su tranquilo y académico comienzo puede despistar al espectador incauto.

“Creo que me he enamorado de un anormal” “¿Te gusta más que yo?”

Desmadre a la Americana nos habla de la fantástica e injustamente vilipendiada Delta House, una fraternidad donde las fiestas de alcohol hasta el límite y las gamberradas de dudosa legalidad están a la orden del día… La Meca de todo estudiante universitario, leñe. En este antro de perversión tratarán de entrar Larry Kroger y Kent Dorfman, dos estudiantes de primer año obsesionados con sentirse integrados en la vida del campus.

Animal House (como se titula la cinta en EEUU) no es más que una sucesión de locuras perpetradas por los integrantes de la Delta House mientras que el “malvado” decano Wormer, en alianza con la fraternidad de pijos (la Omega House), trata de encontrar excusas para expulsar a todos los integrantes de la fraternidad de la universidad. La maravilla, es que no necesita nada más que eso para convertirse en una verdadera joya del cine de humor (de la que tendrían que aprender muchos)

Yo me bajo aquí, no me esperéis despiertos.

“Sólo nosotros podemos tratar así a uno de los nuestros”

El gran acierto de Desmadre a la Americana reside, una vez más, en unos personajes desternillantes encabezados por un monstruo de la comedia con un personaje tan pirado, tan ido, que llega a interactuar con el espectador hasta que éste no tiene más remedio que ponerse a sus pies: estoy hablando de John Belushi.

• Blutarsky: John Belushi (The Blues Brothers) es un estudiante de edad indeterminada y con algún tipo de enfermedad mental (o simplemente es que no llega a estar sobrio en ningún momento) que le impulsa a llevar a cabo locuras del estilo de robar un caballo para plantárselo al decano en su despacho o, sencillamente, verterse mostaza en el pecho en un momento de soledad. Lo que lo hace inolvidable es el repertorio de expresiones que gasta, su personaje puede que no abra la boca más que una decena de veces en toda la película, pero el suyo es un humor mudo que provoca lágrimas de risa.

Blutarsky for president.

Admiren, queridos amigos, el porte señorial de nuestros dos héroes.

• Larry y Kent, alias «Pinto» y «Lenguado»: Los novatos. Larry quiere pillar y Kent encajar. Son tan adorables que sin duda los adoptarías e incluso les dejarías dormir a los pies de tu cama.

Adivinad quién es quién (Pista: el del centro sólo es un capullo)

• Donald Sutherland: Lo sé, ése no es el nombre de su personaje pero, ¿acaso importa? Sutherland interpreta a un profesor progre y porrero que, como bien cantaba Homer, acaba enseñando las nalgas y que en un momento de la película, pone una cara tal que así:

El profe acaba de echar los cerrojos de la habitación: Huyamos.

¿Y qué nos enseña esta maravillosa película a nosotros, seres infectos del inframundo?

Esta película nos enseña que los años de Universidad están para ser disfrutados, la vida más allá de las puertas de la facultad es un coñazo que nos acompañará hasta el fin de nuestros días y los chicos de Desmadre a la Americana exprimen los últimos años que les quedan de “libertad”. En comparación, los pijos de la Omega House tratan de vivir una vida de adultos que no hace sino hacerles parecer idiotas relamidos.

«Miradme, soy un idiota relamido«

“¿Terminó cuando los alemanes bombardearon Pearl Harbor?”

Desmadre a la Americana es, en resumen, una de las mejores películas que vayan a pasar por esta humilde sección. Sus chistes, sus diálogos, las situaciones que plantea… han sido escuela para muchos comediantes actuales y la han convertido en toda una referencia acerca del humor universitario. Es curioso saber que el guión se basa en las experiencias personales de Tom Hulce, que aquí interpreta al bueno de Larry y que años después sería nominado al Oscar por su papel protagonista en Amadeus.

Años después, más concretamente en 2003, se incluyó en una nueva edición de la película un extra denominado “Where Are They Now?” que nos habla de qué pasó con los personajes tres décadas después de la película, bromeando claramente con el divertido final del filme. Buscadlo por la red, es simpático y casi no muerde. La película también fue “víctima” de un spin-off televisivo en forma de serie (llamada Delta House) que se emitió entre enero y abril de 1979. Todo un éxito.

Os dejo con uno de los temas de la banda sonora, probablemente el más conocido internacionalmente:

Como Youtube no es perfecto, tendréis que seguir el ENLACE.