Ocurrió a mediados de los noventa: el diario El Mundo anunció el nacimiento de su suplemento infantil, El Minimundo. En una breve reseña, uno de los estrenos: Calvin y Hobbes, con la frase “se trata de las aventuras de un niño y su tigre de peluche”.
No es fácil definir Calvin y Hobbes en una frase, así que si os parece bien voy a usar unas cuantas más. Calvin es un niño de seis años con una imaginación prodigiosa, gamberro y contestón. Hobbes es un tigre de peluche que, en la imaginación de Calvin, cobra vida, camina erguido y es la voz de la razón. El tebeo se presenta en tiras cómicas de prensa, con algunas excepciones a página completa.
Los Personajes:
Calvin:
Calvin sólo piensa en divertirse: tirarse con el trineo colina abajo, molestar a las chicas y jugar con Hobbes hasta que caiga el sol. El mundo de los adultos es extraño y aburrido, y desde sus 6 años Calvin filosofa y ridiculiza lo que hemos aceptado como normal. Con su increíble imaginación puede convertir la realidad en, por ejemplo, una aventura alucinante contra seres del espacio.
Hobbes:
El mejor amigo de Calvin es su tigre de peluche, Hobbes, inteligente y pausado, que intenta poner un poco de cordura en las ideas de Calvin (aunque disfrute de sus travesuras). Mantiene su lado salvaje de tigre, que aflora para asustar al niño, quien se ve convertido en su presa. Si cualquier otra persona entra en escena, los espectadores veremos a Hobbes con el aspecto de un anodino peluche.
Secundarios:
El resto de personajes tienen sentido en la historia en cuanto a su relación con Calvin, y a cómo influyen en su mundo. Dejando a un lado niñeras o profesores de chistes concretos, vamos a centrarnos en los tres más importantes.
Los padres de Calvin:
Sin nombre conocido, los padres de Calvin le sufren y le quieren a partes iguales. Ella ama de casa y él un abogado corriente, representan la ley, el orden y la sabiduría, y obligan a Calvin a hacer cosas que no llega a entender, pero que, según su padre, “forjan el carácter”.
Susie Derkins:
Susie es lo más parecido a un amigo que puede tener nuestro prota en el mundo real: es formal y educada y choca constantemente con la personalidad de Calvin. Se pelean, juegan juntos y vuelven a pelearse, pero al día siguiente todo empezará otra vez.
Por mucho que Calvin disfrute fastidiándola, Susie no pierde la esperanza de que un día se comporte como una persona normal.
El estilo de Calvin y Hobbes:
La tira parte de un humor clásico, el que podemos encontrar por ejemplo en Carlitos y Snoopy, pero con más «mala baba» aún, más afilado y con más vueltas. La ironía y el cinismo se ven reflejados en personajes como los padres de Calvin, mientras que las reflexiones más profundas suelen estar en boca de nuestro protagonista, o de Hobbes, que viene a sacarle de un error. Las tiras mezclan y alternan filosofía y humor gamberro.
Calvin: ¿Ah sí? Define «normal».
El dibujo es detallista, con unos paisajes que te rodean y unos personajes que con pocas líneas muestran mil expresiones, en unas poses que a veces son más de dibujo animado que de cómic. Los entornos nevados y frondosos bosques son los escenarios característicos de Calvin y Hobbes, donde rara vez vemos una ciudad.
Bill Watterson: el autor y la historia:
A Watterson hay que darle de comer aparte. Es un genio, y se nota no sólo a las pocas tiras leídas de su obra, sino al conocer más acerca de él.
Bill Watterson es un gran defensor de su trabajo y de la integridad del mismo, por lo que ha tenido más de una disputa con las editoriales, en cuanto a problemas con la publicación, formato y tratamiento de su obra. Watterson mantiene que la comercialización de productos derivados (esto es: muñecos, tazas, peluches, juegos..) la desvirtúa por completo, y se muestra totalmente en contra de la creación de cualquier juguetito basado en sus personajes. En sus propias palabras “Yo creé a Calvin y Hobbes como personajes de cómic. Cada producto podría violar el espíritu de la tira, contradecir su mensaje y llevarse algo del trabajo que yo amo”. Antes y después de ocuparse de Calvin, el autor ha participado en distintas publicaciones y eventos, con trabajos poco conocidos.
La tira se publicó de 1985 a 1995, momento en el que el autor, por decisión propia, puso fin a las aventuras de Calvin y Hobbes. En España, tras pasar por alguna otra editorial, es Ediciones B la que ha publicado la obra íntegra y en multitud de formatos, aunque en orden no cronológico, lo que en este caso no es un problema, ya que las tiras rara vez se continúan de un álbum a otro.
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