Taylor Lautner, conocido entre las más jóvenes por interpretar a Jacob en la saga Crepúsculo, ha visitado nuestro país para promocionar su último proyecto, Sin Salida, película que se estrena el 14 de octubre y que supone su debut como protagonista. En esta primera aventura -en la que también ejerce de productor a través de Quick Six- ha tenido el privilegio de compartir cartel con talentos precoces como Lily Collins o consagrados interpretes como Sigourney Weaver, Maria Bello o Alfred Molina. Sobre este y otros temas relacionados con la película charlamos con él en esta entrevista.

Pregunta: Llama la atención como primer proyecto como protagonista hayas elegido un título tan comercial mientras que tus compañeros de Crepúsculo han optado por un cine más independiente…
Respuesta: Desde la primera vez que oí hablar de esta idea, me enamoré de ella. Desde ese momento supe que quería que fuera mi siguiente proyecto, sin importarme lo comercial que fuera. Sabía que este era un personaje con el que podría plantearme un reto como actor.

P: ¿Y no sientes presión por la taquilla?
R: No. No necesariamente. No estaba pensando en algo como eso cuando escogí el papel. Estaba más nervioso por poder hacer esta película, porque desde la primera vez que leí el guión hasta que me puse frente a la cámara pasaron cinco meses, lo cual es muy poco tiempo, así que yo estaba impresionado.

P: ¿Qué te motivó para elegir esta película?
R: Hay un montón de ellos. Aunque el más importante es que era algo muy diferente a lo que había hecho hasta el momento y que iba a suponer todo un reto para mí: física y emocionalmente.

P: Además de como actor, has participado como productor a través de Quick Six, ¿hasta qué nivel te implicaste en la producción? ¿Era importante estar desde el principio en todo el proceso en tu primer papel protagonista?
R: Era muy excitante y un verdadero sueño hecho realidad el estar envuelto desde el primer momento en que la idea de este proyecto se plasmó. Pero fue un gran esfuerzo de equipo. Pero el estar implicado, ya sabes, en el desarrollo del guión, en la creación de los personajes. Fue una enorme ayuda para mí como actor, porque cuando llegué al rodaje tenía la sensación de conocer realmente bien a mi personaje dentro y fuera de la película y no simplemente comenzar a pensar en su historia.

P: ¿Participaste en la selección del casting?
R: Todos teníamos nuestras ilusiones acerca de quién interpretaría cada personaje. Yo no decidí quién iba a ser, pero recuerdo que cada uno tenía su propio sueño. Nuestro sueño para la psicóloga era Sigourney Weaver y el hecho de que aceptara fue increíble. Siempre he sido un enorme fan de Jason Isaacs, mi personaje favorito de los que ha interpretado es el del villano en la película El Patriota. Él tiene tanta experiencia, ha pasado por tal cantidad de roles en su carrera… y es reconocido por hacerlo genial como el malo de la película. Nos pareció muy divertido situarlo como el bueno de esta película.

P: ¿Hubo alguna escena que leída en el guión se pensó que no se haría y que finalmente sí está en la película?
R: La escena del camión está en el guión desde el principio y desde entonces me pareció genial el poder rodarla. Al principio no me iban a dejar que me pusiera ahí arriba, pero se negoció y al final me dejaron, aunque costó lograrlo. No estaba en el guión, pero la escena en la que me deslizo por el cristal… Descubrimos ese lugar en el estadio de béisbol, vimos ese enorme ventanal por encima de los ascensores (escaleras mecánicas) y pensamos: «Tenemos que encontrar una manera de poner esto en la película«. Y yo dije: «Ok. Si encontramos una manera de meter esto en la película yo quiero hacerlo«.

P: El hecho de tener amplios conocimientos en artes marciales tuvo que ser de gran ayuda ¿no?
R: Sí. Las artes marciales fueron definitivamente de gran ayuda, me encantó el hecho de poder incorporarlas, pero claro, había un montón más de cosas que jamás había hecho y necesité entrenamiento específico antes de comenzar a rodar: boxeo, motociclismo, lucha libre… Esto también me encantó, aprender tantas cosas nuevas.

P: ¿Cómo se planificó la escena del estadio? ¿Qué complicaciones hubo?
R: El partido fue más corto de lo que esperábamos, así que… Nosotros sabíamos que sólo teníamos unas tres horas para rodar esa escena, así que tendríamos que hacerlo lo más rápido posible. Y luego terminó siendo el partido más corto de toda la temporada (2h 18min). Eso no nos fue de mucha ayuda. También fue todo un reto porque estábamos rodando con decenas de miles de fans del béisbol que no sabían que íbamos a tratar de rodar una película durante el partido. Así que cuando colocamos las cámaras y los actores comenzaron a pasearse ellos se comenzaron a distraer y hubo que sacar carteles diciendo: «Por favor no miren a las cámaras o a los actores«… Lo que hizo que miraran a las cámaras diez veces más. Además, estábamos a mitad de una toma, yo caminaba entre la multitud y la gente me paraba para pedirme un autógrafo o una fotografía y yo les decía: «Lo siento, ¡estoy rodando una película ahora mismo!«

P: La bajada de la rampa hubo que repetirla 8 o 9 veces ¿no?
R: Sí, la rodamos un montón de veces porque queríamos un montón de ángulos distintos.

P: Nathan es un chico que de repente descubre que su familia no es su familia y tiene que descubrir quién es, ¿cómo trabajaste esta parte emocional del personaje?
R: La parte emocional de Nathan, las emociones que va desarrollando a lo largo de la película, fueron bastante complicadas de relacionar con el personaje. Lo mejor que podía hacer cuando rodábamos era alejarme un paso y preguntarme a mi mismo: «¿Qué pasaría si descubriese que mi vida entera fuera una mentira? ¿Qué haría? ¿Dónde buscaría las respuestas? ¿En quién confiaría?» Y la verdad es que nunca pude responder a esas preguntas y así es como se siente realmente Nathan, está perdido y confuso.

P: Un detalle interesante es que tu personaje nunca coge un arma, ¿fue una decisión premeditada?
R: Sí, es algo en lo que pensamos mientras estábamos creando el guión. Nos pareció muy guay que Nathan tuviera aversión a las armas, nos pareció que sería más interesante de ver si no utilizaba armas de fuego en toda la película.

P: ¿Cuál es tu escena favorita de la película?
R: Mi escena favorita a la hora del rodaje fue justamente la que abre la película, cuando estoy en el capó de la camioneta. Fue una locura que jamás pensé que me dejaran hacer. Mi escena… O mejor, mi secuencia favorita para ver, es toda la secuencia del tren, cuando nos montamos en el tren y hay esa escena romántica, la escena de lucha y cuando nos bajamos.

P: ¿Te ves convertido en un héroe de acción en el futuro?
R: No quiero hacer lo mismo una y otra vez. Los actores a los que admiro (Tom Cruise, Matt Damon…) han hecho algunas películas de acción geniales, pero también se han desafiado a sí mismos en una enorme variedad de papeles. Es decir, me he divertido muchísimo haciendo esta película, pero ahora quiero hacer algo completamente diferente.

P: ¿Qué tipo de películas te gustaría hacer ahora?
R: Sinceramente, cualquier cosa. Quiero decir. Mi meta es ser capaz de interpretar una amplia variedad de papeles. Así que no sé qué será lo siguiente que haga, pero mi meta es ser capaz de hacer de todo un poco.

P: ¿Con qué director con los que has trabajado te has sentido más cómodo?
R: He tenido mucha suerte de trabajar con los directores con los que he trabajado. Me encanta como en la franquicia de Crepúsculo hemos trabajado con distintos directores en cada película, porque cada uno aportaba algo diferente y creo que cada director ha encajado perfectamente en su película. Pero no podría elegir a uno con el que me haya llevado mejor o haya conectado… Me encanta como Chris Weitz dirigió Luna Nueva… Acabamos de terminar de trabajar con Bill Condon en las dos últimas películas de Amanecer y él lo ha hecho fenomenal… John Singleton también ha sido genial…

Traducción y transcripción: RJ PROUS