Mientras que el mundo del cine se debate en un devenir de continuos remakes, precuelas y secuelas, en la pequeña pantalla, y más concretamente en el terreno de las series, se vive un momento muy dulce en el que cada temporada se preparan nuevos y más arriesgados proyectos hasta el punto de que cada capítulo de una serie se convierta en una pequeña superproducción, un buen ejemplo lo dio el año pasado Juego de Tronos.

En este terreno uno de los reyes indiscutibles es uno de los «elegidos» de Spielberg: JJ Abrams, que comenzó en el negocio de la televisión con Felicity, serie que sirvió para demostrar que sabía lo que se hacía y que le valió el permiso para hacer que viera la luz Alias y, posteriormente, Perdidos (Lost), probablemente uno de los mayores fenómenos televisivos de la última década. Tras la conclusión de Perdidos, Fringe ha recogido el testigo en espíritu (y por espíritu nos referimos a ese gusto de Abrams por abrir más y más frentes e ir soltando pistas para mantener al espectador enganchado) Pero Fringe no ha tenido el éxito de su predecesora y muy probablemente finalice su emisión esta temporada…

Con este panorama JJ Abrams ha movido ficha presentando en la CBS Person of Interest, un show que está generando tal expectación en la cadena que se ha optado por emitirlo en el horario que ocupara la pasada temporada CSI y que, por lo que hemos podido ver en el piloto, vuelve a jugar con personajes de pasado oscuro y flashbacks para explicar su historia, pero esta vez con el trasfondo ‘realista’ de la vigilancia de los ciudadanos estadounidenses por medio del Gran Hermano que constituyen los cientos de cámaras que pueblan las calles de Norteamérica. La serie llegará a España el 6 de Octubre en Calle 13.

El argumento de la serie nos puede recordar al de aquella unidad de Precrimen que liderara en su día Tom Cruise o al de aquella serie sobre un periódico que viene del futuro (Edición Anterior) y que protagonizara Kyle Chandler (Super 8): El protagonista (James Caviezel) ha de prevenir crímenes que aún no se han cometido ayudado por la información que le proporciona un misterioso multimillonario (Michael Emerson). La idea, aunque no sea nueva, es atractiva, pero plantea una serie de inconvenientes que no se nos han pasado por alto a quienes hemos podido ver el primer capítulo de la serie.

El principal de ellos es la escasez de personajes fijos. Otras series del estilo de caso-resolución como pueden ser Bones, NCIS o la mismísima House M.D. se caracterizan por un elenco de personajes de lo más variado, cada uno con su historia particular. Sin embargo, en este primer capítulo se nos presenta tan sólo a dos protagonistas y, mientras que Emerson interpreta a la perfección el papel que tan bien sabe hacer de tipo hermético e inquietante, Caviezel no llega a convencer como brazo ejecutor de la pareja, habrá que ver cómo se desarrolla su personaje en los próximos capítulos. Además de ellos,  se nos presentan una policía que trata de averiguar quién es nuestro protagonista (Taraji P. Henson, Larry Crowne) y un detective corrupto (Kevin Chapman), pero son personajes ‘externos’ a la pareja principal y difícilmente podrán aportar consistencia a la serie. El otro inconveniente es la necesidad que tiene una serie de este tipo de una subtrama potente. Si Person of Interest se centra en la presentación de nuevos crímenes por prevenir y no nos suministra una subtrama interesante está condenada a desaparecer. Por suerte JJ Abrams tiene esta lección bien asumida desde hace tiempo, y además cuenta con la inestimable colaboración de Jonah Nolan, escritor de la novela en que se basa Memento y co-guionista de maravillas como El Truco Final o El Caballero Oscuro.

¿Conclusión? Person of Interest puede convertirse, si juega bien sus cartas, en un auténtico bombazo esta temporada, hecho que los chicos de Calle 13 han sabido ver y que aprovecharán estrenando la serie tan sólo con dos semanas de diferencia con Estados Unidos (escuchando, ya de paso, una de las peticiones más repetidas por el público español durante los últimos años).