Röki, una aventura de corte independiente con dinámicas jugables apegadas al «point and click» ha llegado recientemente a Nintendo Switch y Steam para trasladarnos a un rico mundo en el que las fábulas nórdicas cobran vida. El juego nos presenta a una joven llamada Tove, que (al igual que Sarah, la protagonista de Dentro del laberinto) debe adentrarse en un mundo mágico, lleno de peculiares criaturas que la ayudarán a salvar a su hermano pequeño.

Por chocante que pueda resultar, el filme de Jim Henson es un buen termómetro para comprender qué es lo que nos depara la propuesta narrativa de Röki. Tanto las premisas como el posterior desarrollo de ambas historias tienen puntos de contacto, así como en cuanto a algunos temas, el fondo metafórico de la fantasía y el tono pretendidamente familiar, pero sin renunciar a la oscuridad de ambas propuestas, más acusado en el caso que nos ocupa, con temas como la pérdida y el duelo muy presentes. Ese espíritu de fábula, de cuento capaz de enganchar a grandes y pequeños está en Röki desde el principio de la aventura. Aspecto este bien subrayado con el estilo artístico elegido para que cobre vida con una presentación visual que recuerda a un cuento de dibujos y una música que tira hacia cierta melancolía que casa a la perfección con la temática abordada.

La obra pica de diferentes tradiciones de la mitología nórdica en el amplio sentido de la palabra. Hay referencias al folclore islandés, sueco o noruego sin hacer distinciones. Roki crea una amalgama coherente y rica en matices en las que encontramos desde personajes como el gato de Yule islandés, al tomte (que vendría a ser el gnomo navideño sueco), o conceptos como el Utangard germánico que, según la tradición es un espacio o un estado mental dominado por el caos, es salvaje y anárquico. Algunos de estos conceptos, lugares o ideas de la tradición nórdica son fácilmente reconocibles para quien los conozca, mientras que otros se han transformado para dar lugar a nuevas realidades propias del universo creado por Röki. Este mundo concebido expresamente para sus personajes y la experiencia del jugador es uno de los atractivos más llamativos de esta propuesta de Polygon Treehouse y United Label.

¿Y qué nos depara su propuesta jugable? Deudor del clásico point & click, Röki se presenta como una aventura repleta de puzles en los que impera el razonamiento lógico. Los retos propuestos pueden ser más o menos desafiantes, pero tienden (en general) a ser justos con el jugador quien, usando la lógica o atendiendo a las pistas recabadas a lo largo de su camino, puede sacarlos todos adelante. A fin de cuentas el espectro de público al que se dirige el juego es bastante amplio y evita dejar a nadie fuera de la aventura. La última parte del juego, además, presenta alguna variación jugable que ofrece mayor variedad al conjunto. Si se le puede reprochar, en cambio, cierta rigidez al movimiento de nuestra protagonista en determinados momentos.

La protagonista lleva, por otra parte, una libreta que se convierte en una suerte de diario de viaje en el que, además del mapa con el que poder avanzar y situarnos en todo momento, se van añadiendo notas y pistas acerca de lo que hemos ido viviendo y descubriendo (lo que supone una gran ayuda en algunos puzles), así como una serie de recuerdos a modo de coleccionables, cuya búsqueda permite alargar un poco más la vida de un juego que en menos de horas puede completarse sin dificultad.

Estamos ante una grata sorpresa en la escena independiente. Röki presenta una conmovedora historia que ya desde los primeros minutos de juego nos entra por los ojos y ofrece una experiencia jugable perfecta para todo tipo de público.