El presente volumen, el 21 de la colección, incluye los números #160-167 de la colección Conan el Bárbaro publicada por Marvel entre los años 70 y 90, además del Annual #7 de la misma cabecera, aparecido originalmente en 1982. Estamos pues, ante la reedición de una de las etapas más celebradas llevada a cabo por Michael Fleisher y John Buscema a partir de los relatos del personaje creado por Robert E. Howard.
Las Crónicas de Conan nos ofrece una serie de relatos de la mejor tradición de las narraciones de espada y brujería, muy alejadas de algunas de las modernas visiones del personaje, mucho más sombrías e interesadas en escudriñar la psique del héroe. Aquí encontramos poco o nada de esto, los personajes quedan muy bien definidos en un par de trazos: Conan y Fafnir son unos soldados de fortuna (como se denominan a sí mismos) con un marcado sentido del honor, la justicia y la amistad, por lo que no pierden la ocasión de meterse en problemas si alguien les necesita. Así, Flesiher no necesita profundizar demasiado en sus personajes, lo que prima es la aventura. Batallas, brujas y hechiceros, demonios y hermosas mujeres es lo que vamos a encontrar entre las páginas de este libro.
Esta simplicidad argumental supone un gran aliciente para nuevos y/u ocasionales lectores, ya que desde la primera página entran en comunión con el personaje y su mundo. Hay, claro está, algunas referencias a aventuras anteriores, pero estas son mínimas y apenas distraen de la trama principal, pues que se explican en el momento. Y es que la estructura que siguen las distintas historias que abarcan este volumen tampoco destacan por su complejidad. En todas nos encontramos a Conan, bien solo o acompañado de su compañero Fafnir, paseando tranquilamente hasta que alguien se abalanza sobre él para intentar matarle o hasta que se cruza con una esbelta chica en apuros.
El libro podría tomarse como un diario de viaje de Conan, no hay una gran trama detrás que englobe todas sus aventuras. El nexo de unión entre las distintas historias son las vivencias de sus personajes. Por ello, sin llegar a serlo, y de nuevo para suerte de los lectores neófitos, este volumen podría tomarse casi como un tomo único. Digo casi, porque el número #167, La criatura del amanecer de los tiempos, narra una nueva el comienzo de un aventura de este peculiar dúo de bárbaros pero nos deja con un final abierto, dando así pie a la próxima entrega. Fatal porque nos deja con la miel en los labios (es una de las historias más interesantes del libro) y rompe esa sensación de unicidad del tomo, pero perfecto a nivel editorial, pues asegura un mínimo de ventas para el siguiente volumen.
Junto al mencionado La criatura del amanecer de los tiempos, quizás el relato más atractivo sea La caverna de las lianas malditas (dibujados por Charles Vess y John Buscema y escrito por Michael Fleisher), un guión de corte fantástico en el que nada es lo que parece y donde el amor juega un papel importantísimo. El lector más cinéfilo encontrará también interesante La Casa de las Calaveras, que guarda algún que otro parecido con su film coetáneo La Mano (Oliver Stone, 1981).
Como broche al libro, se incluye el Annual #7, guionizado por Roy Thomas y que está basado en la novela Conan de las islas, de Robert E. Howard, que nos muestra a un héroe mucho más maduro, cuando ya se había convertido en el rey de Aquilonia.
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