En un evento presentado por el productor Roy Conli en Madrid hemos podido disfrutar de las primeras imágenes de Mundo Extraño, la nueva película dirigida por Don Hall y Qui Nguyen -artífices de Raya y el último dragón (el primero como director y el segundo como co-guionista)- que evoca desde su mismo arranque al cine de aventuras más familiar.

La apuesta de Walt Disney Animation Studios para estas navidades (un poco antes, el 25 de noviembre) parece querer recuperar la fórmula de aquellos coqueteos del estudio con la ciencia ficción a principios de siglo (El planeta del tesoro [también con Conli como productor] y Atlantis: El imperio perdido), aunque con un tono mucho más amigable para los peques de la casa.

Con una familia de exploradores -los Clade– como protagonistas, el filme busca ir un poco en la línea de Big Hero 6 en cuanto a buscar un equilibrio entre el componente de acción y aventuras, con la comedia y el tema de fondo, que no es otro que las relaciones entre padres e hijos. La familia es el eje sobre el que se moverá la película. Tanto por el conflicto que mueve a su protagonista, Searcher Clade (interpretado por Jake Gyllenhaal), como por la importancia de las dinámicas entre los distintos miembros de la familia. No parece que el argumento vaya a inventar nada, siendo lo más probable que la fuerza de la historia radique en cómo empaticemos con sus personajes.

Los referentes a los que apunta Mundo Extraño para construir su tono y espíritu son muy variados, aunque todos tienen en común la emoción y el asombro por el descubrimiento como notas dominantes. Autores como Edgar Rice Burroughs o Julio Verne, películas como King Kong o En busca del arca perdida, e incluso cómic como Tintín -como referente de la tradición aventurera de la historieta franco-belga- son influencias y espejos sobre los que se mira Mundo Extraño (explicitados por Conli durante su presentación) para construir un imaginario propio que apela sin rubor a la aventura de corte clásico y pulp.

Esto se traslada tanto al argumento, que a pesar de los obstáculos celebra la curiosidad y el mirar hacia delante; como a la puesta en escena, con la creación de paisajes imposibles capaces de dejarnos con la boca abierta (tuvieron el apoyo de National Geographic para investigar y buscar ideas con las que nutrir este mundo fantástico) y criaturas de lo más variopintas.

Poco más podemos adelantar a estas alturas, pues a dos meses vista todavía queda trabajo por delante. Algunos de los clips que vimos no estaban acabados y también resta trabajo en la parte de doblaje y sonorización. Pero el tono y las intenciones de Mundo Extraño están ya muy presentes. La película aspira a recuperar ese romanticisimo del cine de aventuras que prácticamente se ha perdido en los últimos años (quizás Jungle Cruise de Collet-Serra pueda ser uno de los escasos ejemplos que quedan en Hollywood), pero explotando al máximo las posibilidades que ofrece el medio animado para que el asombro y la espectacularidad vayan de la mano.