El Asombroso Spiderman: El rastro de la araña

El Asombroso Spiderman. El rastro de la araña: Sorpresas televisivas

El Asombroso Spiderman: El rastro de la arañaYa en su prólogo, Julián Clemente nos prepara para lo que está por venir en este El rastro de la araña y da la que presumiblemente ha sido la clave de esta primera fase de Un nuevo día: estamos ante todo un final de temporada, como si de una season finale televisiva se tratase. Y Marc Guggenheim, guionista principal del volumen, se lo toma como tal haciendo valer su experiencia en el medio (por aquel entonces contaba con créditos como productor y guionista en series como Ley y Orden o CSI: Miami).

 

«¡Spiderman está loco!«

 

La misma Panini Cómics también se suma a la fiesta televisiva apostando por «alterar» el orden de los capítulos introduciendo The Amazing Spider-Man Extra! #1, que funciona como interludio de la saga, como una suerte de prólogo a modo de flashforward o prolepsis. Y si bien es cierto que puede adelantar alguno de los giros más llamativos de la aventura, su inclusión «natural» (entre The Amazing Spider-Man #587 y #588) habría roto el ritmo de la narración. No olvidemos que el formato condiciona los ritmos de lectura y no es lo mismo afrontar una serie mes a mes que un arco en su conjunto; igual que no es lo mismo verse un capítulo semanal que pegarse una maratón.

 

Y sin perder la analogía con el formato televisivo, en este capítulo final confluyen las tramas más importantes que se han ido desarrollando en la cabecera desde que se lanzara el skyline de Un nuevo día. ¡Y no eran pocas! Las más importantes, tanto para Peter como para su alterego arácnido son las elecciones a la alcaldía de Nueva York (en la que están involucrados personajes cercanos a él), la identidad de Amenaza (el enésimo duende al que se ha enfrentado hasta el momento) y también la resolución de los crímenes atribuidos al asesino de las rastreadoras. Tres columnas sobre las que se estructura la saga contenida en este tomo.

 

La primera, la de las elecciones, es la que sirve para contextualizar el resto y llevar el peso civil de la aventura, haciendo también de contrapunto al drama heroico habitual. Los debates e informativos sirven de marco para que conozcamos el citado contexto y ver cómo las diferentes actividades de Spiderman y compañía van afectando en el sentir general de cara a las elecciones en curso. Este juego imprime cierto frenetismo a la aventura, pues genera la sensación de que los hechos transcurren en tiempo real y que cualquier nueva noticia podrá determinar quién será el alcalde de la ciudad.

 

El Asombroso Spiderman: El rastro de la araña

 

Y si ese es el escenario o contexto, el fondo no es menos apasionante, con la resolución de los dos misterios ya señalados en el centro de la acción. Respecto a Amenaza existe la norma no escrita de que todos los duendes están íntimamente ligados a Peter de una u otra forma, así que si bien el factor sorpresa es relativo, la revelación de la identidad bajo la máscara sigue siendo muy interesante, más aún las motivaciones que llevaron a Amenaza a ser quién es, siguiendo otra gran tradición del trepamuros: las tramas telenovelescas. Leed esta trama junto a un buen bol de palomitas.

 

Pero reservad algunas para seguir la otra gran subtrama de la saga, la del asesino de las rastreadoras. En esta sí que funciona el factor sorpresa, aunque es cierto que se desinfla en cuanto se resuelve, a pesar de que podría haber dado mucho más de sí en cuanto a ramificaciones y un desarrollo a medio plazo dentro de la serie, porque no podemos perder de vista que aunque estemos ante una «season finale», la vida sigue y las aventuras de Spiderman también. De hecho, la parte final del tomo, además de reestructurar el panorama tras el terremoto provocado por las elecciones y todas las revelaciones, apunta ya algunas de las líneas maestras sobre las que va a pivotar la serie en el futuro más inmediato con personajes que se despiden y otros que regresan o se presentan, como en toda serie de TV que se precie.

Acerca de Daniel Lobato

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El padre de todos, pero como a Odín, se me suben constantemente a las barbas. Periodista de vocación cinéfila empecé en deportes (que tiene mucho de película) y ahora dejo semillitas en distintos medios online hablando de cine y cómics. También foteo de cuando en cuando y preparo proyectos audiovisuales.

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