Después de reencontrarnos con nuestra pandilla de Inaba en Persona 4 Golden nos hemos puesto a revivir Persona 3 en su versión Portable, que Atlus ha recuperado para las consolas actuales. Y sí, al igual que el P4G, el juego nos llega localizado al castellano.

Pudiendo elegir el género del personaje protagonista, nuestra aventura arranca cuando, al retomar nuestra vida estudiantil en un nuevo instituto, descubrimos un extraño fenómeno conocido como la hora oscura, momento en el cual sombras y usuarios de personas se enfrentan entre sí. Grosso modo este es el planteamiento inicial del videojuego. Con sus matices y diferencias, nada que se aleje mucho del esquema de otros Persona.

A diferencia de P4G o Persona 5 Royal, P3P no es la versión definitiva del juego, sino una adaptación del Persona 3 original para la portátil PSP. Dicha adaptación llevó a muchas concesiones y recortes como la desaparición de cinemáticas o una aproximación importante a la visual novel que hacen más tediosa la experiencia respecto a las iteraciones más recientes de la saga. Esta versión tampoco incluía (y este es el aspecto que quizás genera más controversia) el añadido de historia que sí trajo otra revisión de P3: Persona 3 Festival (P3 FES). En cambio, presentaba interesantes mejoras relativas a jugabilidad y calidad de vida. Es decir, una verdadera versión definitiva de P3 sería una combinación de los aportes de P3 FES y del P3P que nos ocupa.

Persona 3 es importante porque sentó algunas de las bases que han terminado por definir a la saga en los años siguientes y es fácil apreciar como, aún con las limitaciones de ser apuestas aún con poco recorrido y por pulir, aspectos como los vínculos sociales o aspectos del crafteo y sistema de combate ya estaban ahí. Más allá de eso, no es la opción idónea si no se conoce la saga. Es una traslación de un juego de portátil de 2009 y eso se nota.

Que la exploración del mundo se base en navegar con un cursor por pantallas estáticas (a las que se les nota demasiado el reescalado) y que (esto ya es percepción personal) los personajes no nos enganchen a nivel emocional, obligan a un sobre esfuerzo para superar las primeras horas de juego hasta sumergirse de verdad en su propuesta.

Por ello, como decía, P3P es especialmente recomendable para quienes disfrutaran de P4G o P5R y quieran descubrir más acerca de la franquicia y profundizar en sus orígenes. El resto deberá superar la barrera de las carencias visuales/jugables; si lo hace, encontrará -de eso que no quepa duda- una de esas experiencia JRPG que marcan el camino a seguir y que a día de hoy sigue siendo igual de profunda y atractiva.

Analizada la versión de PS4.