En este nuevo volumen de la recopilación del Batman de Scott Snyder que está llevando a cabo ECC (poseedora de los derechos de publicación de DC Cómics en España) se dan respuestas a los interrogantes planteados en Ciudad Secreta y se potencia el carácter frenético de aquella, dando lugar a una historia muy adictiva en la que Greg Capullo puede dar rienda suelta a su arte, haciendo valer por qué es uno de los dibujantes mejor valorados de la factoría DC actual.

Si en el anterior tomo veíamos un Batman furibundo, muy impulsivo, en esta ocasión lo que se pone a prueba es su temple y su voluntad. No hay momento en el que no esté contra las cuerdas. Objetivamente la situación le supera con creces, pero se aferra a su determinación como a un clavo ardiendo. Gotham está sumida en una oscuridad absoluta (el tono y los escenarios en los que se movía el Batman de Chris Nolan sigue muy presente en esta etapa) y Bruce Wayne (en sus dos identidades) ha de convertirse en la luz del futuro de la ciudad, por más que las cosas se pongan imposibles o se encuentre la resistencia o las dudas de sus aliados.

En Ciudad Oscura el guionista sigue explorando su particular Año Uno, pero no como nos imaginamos, como un punto de arranque en el que la aparición de un vigilante enmascarado transforma la vida periodística y criminal de la ciudad de turno; sino como un proceso catártico, transformador, a partir del cual crear una Gotham totalmente nueva. Esta decisión genera la sensación de que todo puede pasar y ahuyenta, a su vez, el temor a de la falta de originalidad o interés de las historias de orígenes. ¿Cuántas veces hemos visto/leído sobre el trauma que trastornó al jovencito Wayne y su posterior conversión en un héroe vengador?

Snyder consigue que la historia no nos suene repetitiva. Y buena culpa de ello la tiene la elección del villano de la función. Apartado de los focos en los últimos años (influenciado por el punch de personajes como Joker o Bane, agraciados en sus encarnaciones más recientes a otros medios), y mostrando la imagen de segundón, este arco argumental (que se ha venido desarrollando en Ciudad Secreta y Ciudad Oscura) le reivindica como uno de los enemigos más perturbadores del universo Batman y sería una lástima que en el futuro otros guionistas no se aprovecharan de la reinterpretación que ha hecho Scott Snyder de él.