«Hemos decidido planear nosotros mismos tu próxima estratagema«

Vivimos, y ya es la enésima vez que pronuncio esta frase, una época de revivals. Hay series, como os comentaba hace unos días a propósito de la reedición de Spriggan (con motivo de su nueva serie en Netflix), que regresan de la tumba con nuevas ediciones para aquellos que no tuvimos el placer de su lectura y hay otras que retornan en forma de reinvenciones del concepto original (ahí están las Secret Wars de Jonathan Hickman o Los Picapiedra de Mark Russell) o, como ha venido haciendo DC en los últimos tiempos, a modo de crossovers loquísimos como aquel Batman / Elmer Fudd o el aún más loco Liga de la Justicia / Power Rangers. Algunos de estos últimos inventos salen bien (el primero, sin ir mas lejos, resultó en una reinterpretación muy interesante de los personajes propiedad de Warner), pero otros salen tan condenadamente mal que invitan a la vergüenza ajena.

La clave, y no estamos descubriendo el fuego, es la seriedad con la que se enfoquen los proyectos. ECC publica ahora He-Man / Thundercats y lo primero que siente uno son escalofríos, al pensar en dos de las series más icónicas de los años ochenta convertidas en un mero reclamo publicitario (aunque lo cierto es que la publicidad estaba bastante anclada en su propia génesis). Sin embargo, el cómic que nos traen Rob David, Lloyd Goldfine y Freddie E. Williams II, pese a no ser más que un sencillo recurso de divertimento, está bien escrito y cumple con creces con su objetivo, haciéndonos a los que disfrutamos con las aventuras del príncipe Adam o de Leon-O, retroceder a nuestras tiernas infancias mientras disfrutamos de una historia que bien podría haber dado para la película definitiva para cerrar ambas producciones de animación.

«Todo tiene un final… pero tendremos que luchar contra la oscuridad hasta nuestro último aliento«

Porque los que saltábamos de sofá en sofá al grito de ‘¡Thunder! ¡Thunder! ¡Thundercats! ¡Oooooooooh!‘ con una escoba en la mano y los que empuñaban el mismo utensilio en alto mientras se desgañitaban con un ‘¡Por el Poder de Grayskull!‘ podemos escuchar las sintonías de ambas series resonando en nuestras cabezas mientras He-Man, Cheetara, Orko, Panthro y otros muchos desfilan por las páginas de este cómic. Y lo mejor, la tremenda suerte que tenemos, es que no lo hacen como un muestrario de personajes (como sí ha pasado con otras publicaciones similares), sino que los autores han buscado puntos de unión, sinergias y recursos humorísticos para que la historia quede bien engrasada a través de unos personajes que de verdad funcionen.

He-Man / Thundercats

He-Man / Thundercats no es lo mejor que vais a leer en 2022, pero sí que es un cómic perfectamente disfrutable y un auténtico regalo para aquellos que gozamos con ciertas dosis bien medidas de nostalgia. Los autores hasta se permiten crear ‘nuevos’ diseños y personajes que a buen seguro harán salivar a más de uno y más de dos coleccionistas y siembran en nosotros la certeza de que muchas de estas historias e cuando éramos críos están mucho más que listas para vivir una segunda edad de oro.