Norma Editorial se regocija con una de sus licencias más atractivas dentro del catálogo del cómic europeo con una edición cuidadísima de las que animan a lucir y presumir de colección. Hablamos de Sky Doll de los genoveses Alessandro Barbucci y Barbara Canepa, que empezaran a publicar en 2002 y que cuenta ya con cuatro volúmenes en el mercado, los mismos que recoge esta edición en cartoné presentada con una sobrecubierta inédita que al desplegarla forma un bonito póster.
Sky Doll, para quiénes no conozcáis la obra, es una space opera que sigue a Noa, una muñeca sintética o sky doll, que se cuela de polizona en una pequeña nave huyendo de su dueño y se embarca en una aventura que la lleva a descubrir una naturaleza única que la hace diferente al resto de sky dolls. Y a partir de aquí, podéis imaginar el fuerte componente de aventuras y fantasía que tiene la obra.
La obra de Canepa y Barbucci propone una lectura muy interesante, que vive como pocas la ciencia ficción. Es cierto que no propone un argumento rompedor o muy original y que el interés entre los diferentes álbumes no es constante, siendo víctima de algunos altibajos; pero lo que le otorga a Sky Doll su fuerte identidad frente a otras propuestas (al margen del apartado visual) es la forma en la que combina el escenario de ciencia fantástica con unas temáticas adultas muy críticas, por ejemplo, con el autoritarismo político y religioso, ello a través de un tono en el que convergen con mucha naturalidad pequeñas dosis de erotismo y una punzante ironía.
Siendo Noa el centro de la historia, esta pivota principalmente en torno a dos tramas complementarias. Una más amplia centrada en la élite gobernante y otra más concreta que sigue los pasos de Noa y sus amigos. Desde esta doble perspectiva la pareja de autores es capaz de ofrecernos una mirada más o menos completa del rico mundo que han creado.
Belleza visual
Sin lugar a dudas es en el apartado visual donde Sky Doll saca músculo. De un estilo cercano al cartoon, donde se hace patente el legado que ha dejado la factoría Disney en los autores (ambos trabajaron para la división italiana de la compañía), es muy preciosista y cuida mucho los detalles. La dupla Barbucci / Canepa (uno al dibujo y la otra al color) da un resultado muy potente que viene bien acompañado en la edición de lujo que presenta Norma Editorial. La pena es que el libro no incluya material como los álbumes Lachrima Christi y Spaceship (que incluyen diversas historias que profundizan en la vida de Noa y su mundo) o el spin-off Heaven Dolls. Qzuiás en otro futuro integral.
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