«Si quieres ser libre, deberás iniciarte en la senda del mal«

Me ha gustado el primer volumen de La Chica del Cementerio que edita Ediciones Dimensionales. Más allá de mi relación de amor-terror por la leyenda de los vampiros, me ha gustado bastante lo que subyace a un nivel de fácil acceso para cualquier lector que se acerque cómic que escribe Antonio Sachs (que ya en 2015 demostró su pasión por los chupasangres con su novela Drácula: Año Cero) y dibuja Ertito Montana (Tigre Callejero, Abraxas). Y me ha gustado también el tono íntimo que le da el autor a esta obra, con poco diálogo y sí mucha reflexión de sus personajes, lo que invita a nuestra propia introspección mientras contemplamos la historia iniciática de una vampiresa cuya ambición sólo tiene por rival su total falta de escrúpulos.

Es una historia de villanos. Odette no es un personaje que nos ablande el corazón con su compasión o con algún gesto magnánimo. Pero tampoco lo hace ninguno de los otros personajes que pueblan este cómic. Me recuerda, salvando las enormes distancias, a la saga literaria de La Guerra de la Reina Araña, donde cada personaje luchaba por sus propios intereses y los gestos de bondad traían consigo terribles castigos. Se trataba de unos libros que exploraban la tenebrosa civilización de los drows (o elfos oscuros en el mundo de Reinos Olvidados) que tanto llamaron la atención desde la escritura de la trilogía de El Elfo Oscuro. La Chica del Cementerio, como hacían estas novelas, nos planta frente a una cara B de la humanidad a la que las reglas del juego de la sociedad no aplican y en la que sólo los más malos y los más inteligentes prosperan. Sólo personajes como Odette.

«Demasiado tiempo en el ataúd atrofia las arterias«

Pero hay más. Bajo esa capa de maldad y traiciones uno puede atisbar una llamada a la rebelión frente a los sistemas caducos, a las estructuras de poder e influencia avejentadas y demasiado acomodadas en nuestra sociedad. La protagonista que escribe Sachs vive de acuerdo a las reglas que le impone la sociedad de los vampiros, pero las utiliza a su favor para ir derribándolas y reescribiéndolas para adecuarlas a su propia historia. Es aquí donde es más que probable que muchos encontremos un punto de conexión (sobre todo cuanto más jóvenes y menos resignados) con la protagonista y esto, definitivamente, juega muy a favor del interés de la trama.

La Chica del Cementerio #1: Ville Lumière

Este primer volumen nos cuenta los inicios de algo mucho mayor, de un alzamiento o de una guerra de una sola vampiresa contra todo y todos, dejándonos a las puertas de lo que pueda llegar a ser en el futuro. Es por ello que apenas hay espacio para el drama, que a buen seguro terminará por llegar, sirviendo sus páginas para que conozcamos de primera mano hasta dónde está dispuesta a llegar Odette en su búsqueda de poder en la noche de las calles parisinas. La gente de Ediciones Dimensionales remata este interesante primer volumen con una galería de viñetas que nos muestran parte del proceso creativo previo a la edición del presente volumen que llega en marzo, un mes en el que las reivindicaciones por la igualdad entre hombres y mujeres cobran especial fuerza, a nuestras librerías con una protagonista que no hace distinciones de género cuando ha de abrir una garganta de lado a lado.