Retomamos la aventura protagonizada por la Wakaba, la joven hechicera del libro, y Caperucita Roja, el mosntruo con el que ha sellado un pacto, en el segundo tomo (de cuatro) de Crimson Grimoire, una de las últimas novedades de Panini Cómics en su línea manga.

«Quería que todo fuera más bonito de lo que es en realidad«

Tal vez por lo concentrado de la obra, que A-10 quiere contar muchas cosas pero tiene poco espacio, la sensación de caos sigue presente en estas páginas. La acción tiende a precipitarse en bastantes momentos y en cuatro de los cinco capítulos que componen el tomo vienen precedidos por una página dedicada a explicar y profundizar en diferentes aspectos relacionados con los grimorios y los monstruos. Conviene, pues, hacer una lectura activa, atendiendo a los detalles, para no perderse y tener que retroceder para recuperar el hilo. No se trata de una lectura compleja, ni mucho menos, es una cuestión de tiempos. A-10 va muy rápido y se queda en una vistosa superficie, cuando la obra pide momentos de reposo para conocer a sus personajes y escenarios.

Al margen de esto -que no parece que vaya a solucionarse en los dos volúmenes que restan-, Crimson Grimoire sigue siendo muy disfrutable. Este segundo tomo arranca donde lo dejó el anterior, con Caperucita Roja contra las cuerdas y Wakaba haciendo valer lo especial que es. Superado el combate, sin tiempo para tomar aire, al dúo se le presenta un mundo desconocido para ellas y la organización dedicada a proteger al mundo de cualquier amenaza de carácter mágico (la Gesellschaft) les hace la invitación para que entren a formar parte de la misma.

Escenas sacadas de turbios thrillers de sádicos asesinos y el relato de la primera bruja hacen ver a nuestras protagonistas que la cosa va en serio, que ser una hechicera del libro no es ningún juego. El grueso del tomo está dedicado a subrayar la importancia de la misión de la Gesellschaft y el peligro que supone la Fraternidad (así es como denominan a la organización enemiga) para el mundo entero. Se presentan nuevos personajes, y en el clímax de una nueva batalla se acabó lo que se daba. La estructura que sigue este nuevo tomo es idéntica a la del primer volumen, con lo que os quedaréis con la miel en los labios y con ganas de más.