Desde fuera es muy complicado entender lo que atraviesa una persona cuando sufre ansiedad o depresión, en sus diferentes grados, y es aún más complicado lidiar con ellas cuando las padeces en primera persona. Lo peor de todo es que, hoy en día, hablar sobre enfermedades mentales o decir que estás pensando en asistir a un psicólogo para buscar una ayuda que tu grupo familiar o de amigos no puede ofrecer, se estigmatiza y rápidamente te tachan de loco, restando toda la importancia a la atención que estas enfermedades merece, brindando mensajes algo banales como “no estés tristes”, “sal de casa” o “tienes que ver la vida de otra manera.

Y es que las enfermedades mentales no deberían ser tratadas a la ligera, y lo digo desde una perspectiva en el que alguna de estas enfermedades está lidiando conmigo.

ESSAYS ON EMPATHY

Essays on Empathy es un juego donde puedes encontrar diez juegos cortos en los que se tratan diferentes temas. Todos y cada uno de ellos tienen una atracción que los hace especiales, pero tres han sido las que me han atravesado y conseguido emocionar en unos límites que no me imaginaba.

En Eternal Home Floristry, un asesino a sueldo termina en una floristería después de un trabajo que no ha salido nada bien. Allí, un anciano nos hablará sobre como las flores no son simple artefactos decorativos, sino que con ellas se pueden expresar emociones de todo tipo. Por ello, a través de un minijuego, iremos creando diferentes racimos para entregarlos a la gente. Con ello nos habla del arte, del significado que tienen las cosas y que incluso la persona más racional o fría del mundo puede emocionarse. Incluso sacando a la luz su propia realidad, su propia sexualidad y decir abiertamente al mundo que es lo que quiere.

The Bookshelf limbo directamente es un puñetazo en el corazón de quien lo juega. La historia no dura más de cinco minutos y se desarrolla en una librería donde tendremos que elegir que comic le compramos a nuestro padre por su cumpleaños. A medida que vamos eligiendo libros vamos viendo que, en su diálogo interno, nuestro protagonista y su padre no han tenido una relación demasiado buena, y decidir qué comic escoger tendremos que meternos dentro de él sobre qué tema queremos hacerle entender: Sexualidad, la relación entre los dos, una aventura sin más, sobre el tarot… la decisión que escojamos no cambia el final, un final que deja paralizado por lo seco y frío. Es una aventura que habla sobre la ansiedad de decirle a una persona importante ciertas cosas que en nuestra vida no son como pensaban.

Pero el juego que más me ha dejado paralizado, resoplando y queriendo entrar dentro de la pantalla para terminar cuanto antes con la situación que estaba observando, ha sido Behind Every Great One. Gabriel, un artista de éxito con un ego inmenso, y Victorine, su esposa y musa, son un matrimonio aparentemente normal, pero las cosas no son así cuando vas avanzando en el día a día de Victorine.

La dinámica del juego es manejar a Victorine e ir haciendo las labores del hogar mientras, Gabriel, se dedica a su obra. Lava los platos, plancha, limpia la casa, el baño, haz la comida… son algunas de las tareas a realizar, pero no te dará tiempo a todo. Cuando termina el día, después de hacer cuatro tareas, llega la cena donde Gabriel te dejará ver que hay cosas de la casa que no se han hecho. A medida que Victorine va haciendo más y más labores, la pantalla se va acercando al jugador hasta un punto en el que no puedes hacer nada y Victorine rompe a llorar, liberándola de toda esa depresión y angustia que vive en el día a día.

Pero el juego tiene métodos para hacer que Victorine se relaje como fumar, leer o trabajar en el ordenador. Pero, a medida que, pasando los días, van llegando invitados que ocuparán espacio en los lugares de desconexión de Victorine. Además, las visitas no ayudarán en nada para reducir la ansiedad y el estrés que sufre nuestra protagonista, pues la van humillando sobre su aspecto físico, como tiene la casa o porque las plantas y el mobiliario. Behind Every Great One nos habla de todas esas mujeres que están sometidas al mandato masculino en una relación heteronormativa, ancladas en una jaula, en un bucle de discriminación diario del que se sienten incapacitadas para salir el cuál, poco a poco, día tras día, acortan su ganas de vivir. Una experiencia devastadora.

Essay on Empathy es un juego que merece la pena, que habla de unos temas serios de una manera seria y que hacen que mediante sus mecánicas los jugadores vayamos viendo la realidad de ciertas cosas que hasta ahora desconocíamos. Un juego de esos que se podrían llamar imprescindibles.