Virtua Fighter 5 Ultimate Showdown

Virtua Fighter 5 Ultimate Showdown: Fiesta por compromiso

Como parte del 60º aniversario de la compañía, Sega moderniza su afamado Virtua Fighter 5 para la generación que se despide. Exclusivo para PS4 (y solo en formato digital), este remozado Virtua Fighter 5 Ultimate Showdown llega con algunas novedades dispuesto a convertirse en una opción a tener en cuenta dentro del competitivo mundo de los fighting games en su versión para esports. Esto es importante, incluso determinante, para valorar una posible adquisición del juego, pues si no tenéis intención de dedicar horas al online o no disponéis de alguno de los servicios que ofrece PlayStation (ya sea PS Now o PlayStation Plus), la vida útil de este Virtua Fighter 5 puede verse seriamente limitada a las pachangas con amigos en el modo local.

 

Virtua Fighter 5 Ultimate Showdown

 

Desde que iniciamos la partida todo va orientado al modo competitivo (no en vano, en Japón el juego responde al nombre de Virtua Fighter esports). El menú principal se divide en dos secciones. A la derecha aparecen los diferentes modos de juegos y a la izquierda tenemos una pantalla en la que podemos ver (pulsando L1 lo haríamos a pantalla completa) diferentes combates entre usuarios de todo el mundo. Los casi 16,5 gb que pesa la aplicación (incluyendo el Legendary Pack que trae como gran reclamo skins retro para los personajes jugables) se componen de cinco diferentes modos de juego dispuestos para entrenar y pelear. El primero se llama «Partida igualada» y vendría a ser el modo principal del juego, en el que peleamos contra otros jugadores a través de Internet y de cuyos resultados se determinará nuestra posición en las clasificaciones del juego.

 

El segundo modo que nos encontramos es «Sala de partidas», un modo de juego en el que podemos crear nuestra propia sala (en la que caben hasta 16 jugadores) o explorar las de otros usuarios y participar en ellas o ver los combates en curso como espectadores. Le sigue un modo «Entrenamiento» donde practicar siguiendo tutoriales (no se entiende que, siendo exclusivo para PS4, los iconos de los botones no se correspondan a los de la consola, «obligando» al jugador a memorizar la correspondencia como primer paso), probar comandos o entrenar por nuestra cuenta. Y poco más… la fuerza de este Virtua Figther se acaba aquí. Los otros dos modos de juego, los centrados en el modo offline, parecen estar por puro compromiso.

 

Virtua Fighter 5 Ultimate Showdown

 

De una parte tenemos el modo «Arcade» en el que debemos superar a ocho rivales controlados por la CPU (siete y uno bonus) sin mayor misterio. Podemos elegir el nivel de dificultad, el traje de nuestro personaje y nos lanzamos a la arena. El último combate, contra Dural (el único personaje no jugable) añade el reto añadido de que no da opción a continuar. Si perdemos, game over. Toca empezar desde el primer combate.

 

En la dificultad normal aquellos jugadores macha botones podrán llegar con cierta solvencia hasta el sexto enfrentamiento. En este sentido, Virtua Fighter 5 Ultimate Showdown es una propuesta muy accesible que premia la estrategia y el aprendizaje del jugador, pero intenta no dejar a nadie atrás, convirtiéndose en una apuesta muy divertida y de enorme jugabilidad. Controles sencillos (dos botones de puñetazos, uno de patada y otro de bloqueo) y un roster de luchadores compacto pero equilibrado (19 en total) le otorga una versatilidad que nada tiene que envidiar a los grandes dominadores del género.

 

Y completando los modos de juego nos queda «Partida local», donde pelear contra algún amigo, pero no contra la CPU. Si a esto añadimos la ausencia de otro tipo de variantes, ya sea torneos o alguna suerte de modo Historia, la experiencia para el jugador ocasional o quien disfrute de la experiencia offline de los fighting games, será bastante pobre.

 

Virtua Fighter 5 Ultimate Showdown

 

Al margen de las opciones jugables, tenemos un par de menús de opciones (uno enfocado a vestir el perfil del jugador de cara a la experiencia online y otro específico para tocar la configuración sonora y del mando), así como un botón para revisar las calificaciones, otro que da acceso a la PlayStation Store y un menú de personalización que no hace honor al término de «personalización», pues apenas ofrece opciones de cambios de colores y algunos complementos aquí y allá; lo justo para justificar su presencia.

 

Mientras esperamos un hipotético Virtua Fighter 6 (el Virtua Fighter 5 original data de 2006), nos tenemos que conformar con un revival que sabe a poco. Muy interesante en cuanto a sus posibilidades multijugador (sobre todo online) gracias a una propuesta jugable muy divertida, pero dolorosamente escasa para quien guste jugar en solitario.

Acerca de Daniel Lobato

Avatar de Daniel Lobato

El padre de todos, pero como a Odín, se me suben constantemente a las barbas. Periodista de vocación cinéfila empecé en deportes (que tiene mucho de película) y ahora dejo semillitas en distintos medios online hablando de cine y cómics. También foteo de cuando en cuando y preparo proyectos audiovisuales.

Deja un comentario:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *