Her
Título Original: Her
Director: Spike Jonze
Guión: Spike Jonze
Reparto: Joaquin Phoenix, Amy Adams, Roonye Mara, Olivia Wilde, Scarlett Johansson
EEUU / 2013 / 126′
Productora: Annapurna Pictures
El reconocido cineasta Spike Jonze, director de títulos como Adaptation o Cómo ser John Malkovich, se atreve con su primer guión original, una maravillosa historia de amor que en apariencia traspasa los límites de toda lógica, pero que en realidad nos muestra un futuro muy cercano y real…
El reconocido cineasta Spike Jonze, director de títulos como Adaptation o Cómo ser John Malkovich, se atreve con su primer guión original, una maravillosa historia de amor que en apariencia traspasa los límites de toda lógica, pero que en realidad nos muestra un futuro muy cercano y real. Tras su aclamado cortometraje I’m Here, donde se nos mostraba una bellísima historia de amor entre dos robots, ahora vuelve a centrarse en el poder de las nuevas tecnologías y como eso ha afectado eso a nuestras vidas y nuestra manera de concebir el mundo. Belleza, melancolía y nostalgia se entremezclan para traernos una de las películas más conmovedoras del año, junto con Nebraska (Alexander Payne, 2013) la más humana y emotiva candidata a los próximos premios Oscar. Alabada por crítica y público, se ha alzado ya con múltiples premios y reconocimientos, ya que no se trata de una cinta de ciencia ficción o una comedia romántica, es un verdadero análisis sobre el ser humano y sus grandes miedos e inquietudes, cómo el avance ineludible de la tecnología ha transformado y modificado las relaciones a todos los niveles.
Theodore, interpretado por el siempre camaleónico y magnífico Joaquin Phoenix, es un hombre aislado y afligido que no ha conseguido superar el reciente divorcio de su esposa (Rooney Mara) y camina sin rumbo, sin saber bien hacia dónde debe dirigirse, hasta que aparece Samantha en su vida, alterando todos los cimientos de aquello que era su vida y pensamiento. Por muy corriente que pueda parecer la historia a simple vista la realidad es bien diferente, ya que la protagonista de esta romántica historia es un avanzado y personalizado sistema operativo. Scarlett Johansson pone la sexy y dulce voz de la maquina, que nos conquistará y emocionará sin aparecer en un solo plano de la película, logrando a través de las palabras más que con cualquier imagen y convirtiéndose en una de sus mejores interpretaciones de su carrera. Ahí es donde reside el poder de nuestra mente e imaginación, la capacidad de evocar, crear y sentir a través de sensaciones y recuerdos, rompiendo con el canon prototípico de una relación de pareja.
Completan el reparto una carísmática Amy Adams y una atractiva y sensual Olivia Wilde, aunque todos son secundarios dejando paso a un espléndido Joaquin Phoenix, quien realiza una labor admirable, alternando el registro cómico con la nostalgia y la tristeza que impregnan cada escena. La cinta no tendría esa intensidad y veracidad si no fuera gracias a su magnífica presencia. También hay que destacar el buen uso de la fotografía, que consigue trasmitirnos una melancolía constante, esa armonía entre la felicidad del pasado y el incierto presente y, por supuesto, la magnífica banda sonora donde colabora la afamada banda canadiense Arcade Fire. Eso coloca el punto final a tan fabulosa propuesta, a esa representación de un futuro utópico e irreal pero que nos es dolorosamente cercano, una historia triste, delicada y enormemente bella. Todos nos reencontramos en esta historia de amor, viendo cómo se puede desarrollar un afecto sin la necesidad de materializar ni personificar esos sentimientos, sino únicamente a través de lo que proyectamos en nuestro pensamiento.
Spike Jonze se adentra en lo más profundo del ser humano, en nuestra incomprensión e incapacidad de amar y entregarnos a otro, en nuestro miedo a no ser correspondidos, a sentirnos diferentes o a ser heridos por los demás. Pero por encima de todo ello está el miedo más real que sufrimos, ese temor innato a la soledad. De eso trata esta cinta, de la soledad en su estado más puro, el miedo que ello nos provoca y nuestra necesidad de refugiarnos para tratar de llenar ese terrible vacio. Nos encontramos en una sociedad cada vez más avanzada y digitalizada, un mundo saturado de información y comunicación pero donde cada vez nos es más difícil expresarnos y mostrar sentimientos auténticos. Hemos perdido la capacidad de comprendernos y protegernos, de escuchar al otro y tratar de adentrarnos en lo más profundo de él, nos hemos convertido en verdaderos autómatas encerrados en nosotros mismos, inmunes al dolor, solitarios y terriblemente tristes. Her nos recuerda nuestra humanidad extraviada, la ilusión, el amor y la esperanza en un mundo mejor.
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