«La historia de George Lucas podía haber acabado ahí«

No recuerdo exactamente la edad que tendría cuando vi por primera vez La Guerra de las Galaxias (Star Wars, 1977). Sé que fue en la tele porque aún no había nacido cuando se estrenó El Retorno del Jedi, pero sí sé que desde entonces cada reposición era de obligado visionado. Luego me volvería a apetecer verla con cada nueva amistad, cada nuevo amor y, ahora que lo pienso, cada vez que en mi vida había algo que servía para diferenciar épocas. Luke, Leia y Han estaban ahí siempre para ejercer de testigo imperturbable de mis nuevas historias y aventuras. Y con cada nuevo acercamiento a la película original y a lo que ha venido después he ido profundizando en su significado, su magia y la naturalidad con la que un crío de siete u ocho años podía sentir como miembros cercanos de su familia a alienígenas con cara de perro y a robots que se comunicaban con pitidos y chasquidos.

Norma Editorial nos trae ahora Las Guerras de Lucas, un cómic documental que hace un breve repaso de la vida de George Lucas para luego lanzarse de cabeza a relatarnos la intrahistoria de la que sería su obra maestra, la película que haría que su nombre fuera conocido por todos los habitantes del planeta. Y, como todas las grandes historias, comienza por un sueño, continúa cuando el sueño se golpea de frente contra la realidad y termina cuando, a fuerza de golpearse una y otra vez, logra abrirse paso y entrar en el olimpo reservado para los grandes nombres de la industria. Contra viento y marea, contra prejuicios que lo tildaban de loco, contra ejecutivos demasiado cómodos como para arriesgar por una cinta de ciencia ficción cuyo guión nunca convenció a nadie salvo a otros visionarios como el propio Lucas.

«Lucas estará 30 minutos al teléfono con Spielberg para compartir con él la emoción de este momento excepcional«

Laurent Hopman y Renaud Roche nos traen un estupendísimo cómic documental que no se deja nada ni trata de endulzar los defectos que todos conocemos del genial director norteamericano. Las Guerras de Lucas, que viene de llevarse varios premios en Francia, es una maravillosa historia que habla de un hombre, su fantasía y todas las grandes personas (comenzando por su mujer) que le ayudaron a convertirla en realidad frente a todos los obstáculos que les fue poniendo una industria más preocupada por la cuenta de beneficios que por el arte y el poder del mismo sobre toda una generación. Hopman y Roche se encargan de dejarnos muy claro que, de no ser por la entrega y la brillantez de gran parte de los involucrados en este proyecto, el mundo no habría podido ser testigo de la gran aventura de fantasía estelar que a día de hoy sigue maravillando tanto a quienes disfrutamos con la primera trilogía como quienes han sido castigados con El Ascenso de Skywalker.

Las Guerras de Lucas

Las Guerras de Lucas te deja con una sensación de buen rollo que mola bastante. Puede que sea porque, por una vez, el loco, el soñador, el ilusionista gana frente al ogro trajeado del despacho carísimo. O puede que, simplemente, uno termine de verla y, como me está ocurriendo ahora a mí, no le quede más remedio que ponerse la imperecedera banda sonora de John Williams mientras trata de dilucidar cómo rayos va a convencer a su pareja para ver esta noche por quincuagésima vez la dichosa película con más reediciones, extras, añadidos y merchandising de la historia del cine.