Largo viaje hacia la noche

Largo viaje hacia la noche: Buscando en los sueños

Una de las mayores características y motivos por los que el cine es un arte maravilloso es la capacidad de abstracción, conseguir que durante dos horas estemos dentro de una historia y no exista nada más. La nueva película del director chino Bi Gan, Largo viaje hacia la noche, no solo consigue esto, sino que además te hace adentrarte en un sueño y sentirlo como si fuese tuyo. Presentada en el Festival de Cannes de 2018, en la sección Un Certain Regard, y a competición en la sección Tabakalera de San Sebastián, por fin llega a nuestros cines una de las experiencias más especiales que podréis ver en los cines.

 

Jue Huang y Wei Tang

 

La película tiene dos partes muy diferenciadas: una primera donde conocemos a un personaje que vaga por las calles nocturnas de Kaili e intenta encontrar a la mujer de la que se enamoró en el pasado. Y una segunda parte en la que nos metemos en el sueño del protagonista, a través de un plano secuencia de casi una hora y, por si fuese poco, en 3D. Estas dos partes tienen un nexo claro, la búsqueda de una mujer que nunca aparece. Ni en la realidad ni en los sueños llega a encontrar esa mujer que tanto desea. ¿Es ella real o es simplemente un recuerdo que realmente no existe?

 

Hay algo hipnótico en Largo viaje hacia la noche, esos escenarios nocturnos, las imágenes con neones, pero a la vez muy desgastadas y destruidas. La banda sonora, que también ayuda a entrar en esa sensación de sueño con canciones y sonidos orientales de una gran belleza. Y las secuencias largas que nos adentran en la mente del personaje, sus recuerdos, sus sueños, su soledad. En la película hay muchos objetos y lugares metafóricos como el agua y las habitaciones encharcadas (muy Tarkovski), el reloj estropeado, signo de la detención del tiempo y eternidad, la fruta, muy presente en toda la película, y esa bengala que no se apaga como representación de lo onírico. Pasado, presente y futuro, sueño y realidad, todo ello se une en una misma historia.

 

Yongzhong Chen y Wei Tang

 

Bi Gan no solo ha creado una obra maestra, ha creado un sueño que se vive con los ojos abiertos. Una película única que cuesta explicar e incluso hablar de ella. Solo queda dejarse llevar por los sueños y adentrarse en una de las experiencias más fascinantes que nos ha dejado el cine en el siglo XXI.

Acerca de Jorge Delgado

Director de cine en fase alfa. Devorador compulsivo de películas y realizador de videocríticas en youtube. David Lynch como respuesta ante cualquier pregunta de la vida.

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