Desde París con amor: Acción, Travolta y ¿amor?

TitularEstamos hartos de recibir películas de escasa calidad, todas con igual forma y distinto contenido, pero que no nos dicen nada. ¿Sí? Puede ser. Pero el cine nunca se puso la meta de mejorar, de innovar. Sólo de entretener. Si entretiene, es que cumple parte o la totalidad del objetivo. Esto lo consigue Desde París con amor. Pero no solo el cine es entretenimiento. Hay que saber como hacerlo. Y esta película no innova en la forma de conseguirlo; calca y copia las estructuras ya existentes. Para que cambiarlas, si no tienes otra forma y no quieres arriesgarte.

El film dirigido por Pierre Morel, cineasta francés y creador de Venganza, repite esquemas de la mayoría de películas de acción, con personajes cómicos, escenas rápidas de peleas y tiroteos, y alguna carga dramática en el trasfondo.

James Reece (Rhys Meyers) es el secretario del embajador de Estados Unidos en París, pero además tiene unos asuntos en la sombra. Colabora para el gobierno estadounidense con algunos trabajillos de poco calado, hasta que un día le llega la gran oportunidad de meterse de lleno en un asunto verdaderamente importante. Se le asigna un compañero venido del otro lado del océano, Charlie Wax (John Travolta), con el que debe desenmarañar una red de traficantes de drogas, algo que desembocará en una cuestión mucho más compleja. Pero James Reece no es solo un tipo amante de su trabajo, también tiene una vida feliz con su futura esposa Caroline (Kasia Smutniak), que tendrá su papel a lo largo de la historia.

TitularDos importantes bazas de este film son que está apadrinada por Luc Besson, autor de la increíble Juana de Arco y la espléndida El quinto elemento, y ex-pareja de Milla Jovovich; y por otro lado la presencia de John Travolta. El bueno de Travolta, que alcanzó su cénit nada más empezar en este mundo con Fiebre del sábado noche y Grease, ha cambiado mucho de aspecto desde entonces. Logrando participar en, la que dicen, una de las peores películas de la historia, Campo de batalla: La Tierra. Aún así, lo mejor de la película es él. Aunque también puede ser lo peor. Si a veces resulta pedante y muy repetitivo, otras sostiene y es el eje de la película y no su compañero de fatigas Rhys Meyers al que le pudimos ver a las ordenes de Woody Allen, y más recientemente en la serie Los Tudor, cuyo papel le ha valido dos nominaciones a los Globos de Oro. Aunque intenta ser el protagonista, este se lo quitan Travolta y su futura esposa Caroline, interpretada por la actriz polaca Kasia Smutniak.

Esta última se convierte en la mujer traidora (previsible desde un principio su doble papel), y generadora de la posible lectura más profunda. Si bien la película es la inconfundible de acción, con una trama y guión muy poco trabajados, al final el terrorismo islámico y la riña entre amor a algo tangible o a algo intangible, rellenan un poco de contenido a la historia. Porque por lo demás hay un barullo de temas increíble: se mezclan las drogas, la prostitución, las tramas políticas, venganzas, y demás, con el terrorismo.

TitularHay un par de escenas de acción, que recurren a exitosos métodos últimamente vistos en pantalla, que no están nada mal, pero en otras se ve que el estado de Travolta pesa más que las técnicas de postproducción, que no pueden mejorar sus movimientos.

En el film hay una lucha entre el amor a una persona física, que puedes tener, tocar, e interactuar con ella, y un amor a algo que no existe delante de nosotros, algo que puede ser mejor que lo que tenemos, pero que no sabemos si es real. A alguien que nos promete algunas cosas y nos da algunas o algo que nos promete todo pero nunca nos da nada. Me refiero al amor entre humanos o al amor a un dios no presente. Dos puntos de vista, en el que uno pulveriza al otro.

Yo me divertí y pase un buen rato, tampoco esperaba mucho; y eso es lo que le pido al cine. Primero entretenme; una vez conseguido, si puedes, hazme pensar. He dicho.

Deja un comentario:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Artículos relacionados