El 4 de febrero llega a nuestras pantallas, Enredados, la última apuesta animada de Disney y con la que la veterana productora suma su título número 50. La historia nos cuenta como Flynn Rider, el bandido más buscado del reino, se esconde en una misteriosa torre y toma como rehén a Rapunzel. La prisionera, lejos de acobardarse, y con la intención de salir de la torre donde ha estado encerrada durante años, sella un pacto con el ladrón y ambos se embarcan en un montón de aventuras.
La película es una clara apuesta de la compañía por aunar la tradición que les caracteriza con las historias que demanda el público actual y la animación digital. Una misión que los directores se tomaron muy en serio. «Puede que el público sepa lo que puede esperar de una película en la que sale Rapunzel«, dice Nathan Greno, «pero le hemos dado un giro totalmente nuevo para hacer una cinta que sea atractiva, fresca y diferente. A Byron (Howard, el otro co-director) y a mí nos encantan las películas clásicas de Disney, y queríamos recuperar ese look retro y tan bonito de los años cincuenta, y mezclarlo con una narración contemporánea, con el ritmo, la acción y el humor del cine actual. Es como colocar una nueva capa a este tipo de historia«.
Uno de los pesos pesados de Disney y Pixar, John Lasseter (creador de entre otras, Toy Story), estuvo implicado desde el primer momento en la producción de Enredados y fue de los que más empeño le puso a conseguir el objetivo que se habían marcado. «Queríamos crear un mundo y una historia únicos que evocasen esa emoción, esa riqueza dramática que caracteriza a Disney, pero que también tuvieran frescura y humor para ofrecer al público algo que nunca ha visto en la animación por ordenador. Los realizadores han creado un mundo que recoge el legado de Disney pero que nos transporta a un lugar que es totalmente nuevo«.
Y para quien aún piense que la animación es cosa de niños, os señalamos algunas de las curiosidades de esta laboriosa producción:
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