«Las cosas que hacen los chicos por dinero hoy en día ¿eh?«

Los que hayáis visto la serie de televisión de Agentes de S.H.I.E.L.D. estaréis conmigo en que la primera temporada fue dando bandazos hasta que el argumento de Capitán América: El Soldado de Invierno obligó a la serie a reinventarse y alcanzar de golpe la madurez. Hasta aquel momento los capítulos servían para mostrarnos nuevos juguetes de la principal agencia de inteligencia del mundo o para ir colándonos de vez en cuando a algún que otro héroe o villano por aquello de complacer a los fans.

Algo parecido le pasa a los Agentes de S.H.I.E.L.D.  de Mark Waid. Cuatro números llevamos en España y la serie no tiene pinta de estar dirigiéndose a ninguna parte. En el primer capítulo, por empezar a la grande y tal, vimos como Coulson reclutaba a un buen puñado de Vengadores para ayudarle en la complicada misión de detener a un dios desbocado y poseído. En los tres que nos ocupan hoy vemos pasar, por orden, a la nueva Ms. Marvel, a Spidey y a Sue Richards (la Bruja Escarlata llegará el mes que viene) y, aunque la serie resulta ligera y divertida de leer, no parece que tenga un objetivo claro… ¿O no es así? La roca rescatada en el primer número, las runas que Coulson descubre al final del tercer capítulo… Pequeños detalles de cada capítulo nos van dirigiendo poco a poco a la primera aventura seria para Coulson y los suyos, pero mientras tanto, Waid prefiere hacernos ver la capacidad táctica y de liderazgo del verdadero protagonista de la colección y, de paso, ir rescatando a tal o cual personajes para mostrárnoslos desde una nueva óptica.

«¡Además, eres un guía turístico terrible!«

Así, como ya he comentado, en Agentes de S.H.I.E.L.D. #2 contemplamos casi por primera vez en nuestro país a la nueva Ms. Marvel (un personaje cuya serie se ha estrenado en junio y del que os hablaremos más adelante). Kamala Khan responde a la nueva ola de reinvenciones de los personajes clásicos que encabezó Nova y que también ha seguido (de manera discutible) el Motorista Fantasma. La diferenciación que persigue esta chavala, aparte de la novedad étnica (¿los musulmanes son los nuevos hispanos en Norteamérica?), pasa por construir una suerte de Spider-Man en femenino, adolescente y enormemente friki de los superhéroes. Con serie propia desde el primer momento y con el aval de un éxito arrollador en Estados Unidos, Khan representa a los adolescentes actuales mucho mejor de lo que podría hacerlo Spidey. Esta nueva inhumana es una ávida lectora de cómics, escribe en blogs, mantiene redes sociales y, sobre todo, se enfrenta incansablemente e inconscientemente a las rígidas normas y costumbres a las que están atados sus progenitores, un poco como cualquier chaval de la actualidad, sea musulmán, judío, cristiano o adorador del espagueti volador.

Spiderman en Agentes de S.H.I.E.L.D. #3

La aventura de esta chica junto a uno de sus iguales (recordemos que Coulson es una enciclopedia ambulante sobre los superhéroes) se ha vivido en España antes incluso que su presentación en sociedad (aunque ya tuvimos ocasión de verla en el cruce de Inhumano con Axis…) y ofrece un breve aperitivo de lo que podremos encontrar en la serie de G. Willow Wilson: una chica con buenas intenciones y sin la torpeza de Sam Alexander / Nova cuyo único sueño es el de ser reconocida por sus héroes de toda la vida, pero que teme perder el amor y la confianza de su familia en el proceso.

«No he dicho el Doctor Muerte, Phil«

El tercer número de la colección es un cómic para que los nostálgicos disfruten como enanos. Waid se une al genio Alan Davis para presentar una historia de corte clásico que bien podría haberse publicado en los dulces años 60, pero que se lee con la agilidad de los cómics de ahora. La aventura que protagonizan Coulson, Spiderman y Pavel. P. Rasputin en la residencia del Doctor Extraño es una verdadera delicia visual en la que Waid exprime su sentido del humor para estar a la altura del dibujante de, entre otras, Miracleman o la premiada Excalibur.

COulson en Agentes de S.H.I.E.L.D. #4

En cuanto a Agentes de S.H.I.E.L.D. #4… Digamos que es un número profético que vuelve a mostrar el lado oculto de la Mujer Invisible ahora que la serie de Los Cuatro Fantásticos está tan cerca de su desaparición en los Estados Unidos por culpa de, entre otros, el enfado de Perlmutter, uno de los actuales CEOs de la Casa de las Ideas. Ya sabemos, por noticias que se han ido publicando que la Antorcha Humana estará presente en la nueva serie que escribirá Charles Soule y dibujará Steve McNiven (el mismo equipo de La Muerte de Lobezno): Imposibles Inhumanos. También sabemos que Reed Richards y su contrapartida Ultimate tendrán un papel preponderante en el devenir de las Secret Wars… Lo que viene este cómic a desvelar es una relación oculta y longeva entre La Mujer Invisible y la agencia de espías más famosa de los cómics que volverá a estar en boca de todos quizás antes incluso de que acabe el verano en nuestro país.

Agentes de S.H.I.E.L.D., como veis, puede parecer no dirigirse a ningún lugar, pero está tocando de muchos de los palos más importantes para el futuro del universo Marvel. Yo de vosotros no perdería ni un número más de esta interesante colección.