«Todos tienen sus razones para hacer esto«

Comienzo mi artículo con la misma frase con la que comienza este cómic y, por ende, esta nueva etapa para los Héroes más Poderosos de la Tierra. Y lo hago así porque mi primer pensamiento al leerla es que Jed MacKay ha plasmado en esa frase sus propios sentimientos: todo guionista que se precie en Marvel quiere en algún momento dado hacerse con Los Vengadores. Algunos quieren aceptar el reto de dirigir la que es siempre considerada como la serie central de la editorial norteamericana, otros simplemente aspiran a escribir una historia muy concreta, los hay que desean crear su equipo perfecto de héroes al servicio de la humanidad… Lo dicho: todos tienen sus razones para hacer esto, porque todos quieren hacerlo, sin importar la carga de responsabilidad que lleve el cargo aparejada.

Jason Aaron ha firmado una etapa para el olvido. Un guionista que nos ha deslumbrado con series como Lobezno y la Patrulla-X o El Castigador, se la ha pegado durante los casi cinco años que se ha tirado al frente de este grupo pese a proponer cosas tan interesantes como la entrada del Piloto Fantasma o tan locas como el ascenso de los vampiros (que sigue oliendo a evento marvelita a medio plazo). Eso puede darnos una medida de lo difícil que es hacerse con el banquillo de un equipo como éste. No basta con enfrentar a Los Vengadores con amenazas capaces de partir la Tierra en dos, tampoco vale con innovar cada dos páginas con conceptos o vilanos nuevos. Hay una épica, una sensación de que cada historia cuenta, que marca el ritmo del resto de las de la casa que ha de estar presente en la cabecera que reúne a sus personajes más poderosos.

«Nos hacemos llamar los Vengadores. Es una advertencia«

He de reconocer que la apuesta de MacKay para esta primera entrega es ilusionante. Comenzando por el equipo: Carol Danvers ha experimentado una evolución y un ascenso tan meteórico a lo largo de la última década que casi me he sorprendido al comprobar que ésta es la primera vez que se pone al frente del equipo. También tenemos a los pesos pesados tradicionales en forma de Thor, Iron Man y Capitán América (en este caso, y por si volviéramos a verlo en alguna película marvelita, en carnes de Sam Wilson), al anterior presidente de esta cofradía de rompecráneos (un Pantera Negra cuya ‘caída’ ni tan siquiera fue mencionada en la etapa de Aaron de una manera relevante) y, cerrando el equipo y aportando una dosis de clasicismo (para ilusión de los lectores), el regreso de Visión y de la Bruja Escarlata. Pura magia, si me permitís la broma.

Los Vengadores #1 (#155)

La historia, aún por concretar, apunta a evento cataclísmico de proporciones universales con la participación del villano más de moda actualmente en la Casa de las Ideas. Aún es pronto para hacerse ilusiones, pero por de pronto yo ya aplaudo que dejemos de lado la obsesión del guionista saliente con el infierno y aquellos que lo dirigen. este primer número está muy bien escrito y el arte de C.F. Villa ayuda a que nos lo creamos y queramos saber más de lo que tiene este equipo para proponernos. Yo, sin subirme al tren del hype, ya le detecto detalles que me hacen leerlo más tranquilo. Mantengamos la esperanza. Los Vengadores han vuelto.