La revolucióin mutante ha tocaco incluso al rugosa y cicatricada cara de Wade Wilson. El mercenario bocazas inicia una nueva etapa de sus alocadas aventuras de la mano de un equipo de excepción: Kelly Thompson y Chris Bachalo. La guionista, que viene de trabajar en Vengadores Costa Oeste y Mr. & Mrs. X, se ha impuesto como misión llevar a Masacre a territorios desconocidos para él.

«Como me estás protegiendo con tu cuerpo de cachos de monstruo ardientes, se me ha ocurrido que quizá te gusto«

Thompson va a por todas en su cometido, convirtiendo a Wade en nada menos que un rey. El rey de los monstruos para ser precisos. Y todo empieza como suele, con una misión que se va de madre. El humor, como no podía ser de otra forma está muy presente desde el principio, aunque también se nos deja entrever que no todo van a ser juegos y risas para Masacre, pues estamos ante un personaje que dadas sus particularidades no termina de encajar con el resto de figuras del universo Marvel. Esa soleddad y su condición de inadaptado (tanto entre los humanos como entre los mutantes) tienen visos de ser temas importantes en la colección.

Al menos para esta primera etapa Thompson se ha traído consigo al robaplanos por excelencia de Vengadores Costa Oesta. Nos enamoró en sus páginas y promete hacerlo aquí también. Es un bonito y divertido guiño de la autora a una serie con la que faltó paciencia por parte de los editores. Otro de los personajes que se deja caer por aquí es Elsa Bloodstone; presencia inevitable habiendo monstruos de por medio. Por su parte, el primer villano de la colección (que se nos presenta en la última página) es otro de esos fichajes que resulta sorprendentemente orgánico teniendo en cuenta el contexto en el que se mueve la historia.

Si vuestro único conocimiento de Masacre reside en sus películas, la colección liderada por Kelly Thompson es un punto de entrada fantástico a su mundo comiquero. Publica, como siempre, Panini Cómics.