«¿Es eso lo que opinas realmente?«

Forja siempre ha caminado por el filo. Por el de la locura, el de la villanía ocasional o el de la genialidad incomprendida. Del mismo modo que nos duele ver a Bestia reducido al intrigante que es hoy, a este mutante no nos cuesta imaginarlo confabulando con Siniestro porque, bueno, a veces hay cosas que Forja puede creer que deben hacerse, aunque la moral y la ética puedan decir lo contrario a la mayoría de los seres inferiores en intelecto o creatividad. Así, el cómic de este mes de la Patrulla-X retrocede un poquito en el tiempo para enseñarnos cómo se ha preparado Forja antes de adentrarse en la Cámara en busca de Darwin. Y sí, lo que reza el título de esta reseña es literal y es horrendo, pero también es muy útil cuando uno busca infiltrarse en una dimensión de bolsillo que está haciendo evolucionar a los enemigos de la Patrulla-X más allá de lo que es abarcable por mutantes y es posible que por cualquier otro grupo de superhéroes de la Tierra.

Mientras, en el presente, y con el protagonista de este número en plena faena, los roces entre Cíclope y Kaos están a punto de dar pie a una catástrofe y yo me pregunto: ¿es que acaso tienen quince años? ¿Es que años y años de convivencias intermitentes y un nuevo hogar para os Summer en la Luna no han bastado para que estos dos dejen de pelearse como si les faltara un hervor? Hay cosas que jamás llegaré a comprender del mundo de los cómics y una de ellas es ésta: que seamos capaces de ver la evolución de un personaje como Magneto desde la villanía pura al heroísmo sin sombras, pero que sea a la vez imposible ver una evolución en la relación entre dos hermanos en las décadas que llevan compartiendo títulos para la Casa de las Ideas.

«Me has preguntado si alguna vez me siento tonto…«

Personalmente me parece un motivo más que suficiente como para darle un buen tirón de orejas a Gerry Duggan. Lo que ocurre en este número bien podría haberse debido a un accidente y ya está, pero volver una vez más con la enemistad entre Scott y Alex me parece un auténtico peñazo y un ejercicio de escritura perezosa por parte del guionista del cómic que nos trae este mes Panini. ¿En serio la nueva etapa de la Patrulla-X va a volver a incidir sobre un tema que ya ha sido abordado cientos de veces? El retrato de Alex que se hizo en la cabecera de Infernales me pareció mucho más interesante sin necesidad de convertirlo en un gilipollas integral, al igual que ocurre con su hermano. Uno puede ser un desastre o un líder nato, pero es cuando le cae mal a la gente (a los lectores) cuando se comienza a quedar atravesado y nos apetece cada vez menos que se sitúe bajo el foco del protagonismo.

Patrulla-X #16 (#138): Destino de X

Para cerrar este Patrulla-X #16 (#138): Destino de X nos encontramos con una revelación que amenaza con poner en jaque los famosos protocolos de resurrección y que, me parece, puede añadirle a esta cabecera un extra de vidilla que nunca viene mal. Lo que ocurrió en la Cámara durante la etapa de Jonathan Hickman se nos quedó clavado en el corazón y, si no me equivoco, Duggan podría estar a punto de dejarnos ver un segundo round de aquella historia, todo un regalo para los fans que nos quedamos con la miel en los labios en esa breve historia que apenas alcanzó para las dos grapas del Reinado de X.