Llegamos a un momento delicado de la colección arácnida y tanto Dan Slott (responsable de Superior Spiderman) como Chris Yost (quien toma el pulso del personaje en Spiderman Vengador) lo tienen claro: toca dar un paso al frente o dar uno atrás, pero las medias tintas se han acabado. El cambio más polémico en la vida del trepamuros desde que Stracynski (con el beneplácito de la cúpula de Marvel) pusiera fin a su matrimonio con Mary Jane ha sido tal que ha llevado al cierre de la mítica cabecera «Amazing Spider-Man» y tras unos meses de preparativos y golpes de efecto parece claro que los autores quieren llegar hasta las últimas consecuencias.
Y una cosa está clara, Yost y Slott saben lo que se hacen. Con esta nueva etapa al frente del héroe más arácnido del cómic ambos autores parecen niños con un juguete nuevo. Las historias que nos relatan en los dos tomos que nos ocupan destilan muy buenas vibraciones. Se les nota emocionados ante el material que tienen entre manos.
En Spiderman Superior #83 (que es una nueva ración de Spiderman Vengador), Chris Yost enfrenta a un renovado Hombre Araña con la Patrulla-X, la Fundación Futuro, Thor y Sonámbulo. Sí, la clave está en «enfrenta», porque este Spiderman ya no es el amistoso amigo de Nueva York y no tolera la insolencia ni la condescendencia de los que dicen ser sus aliados. Con una trama que gira en torno a los extintos Seis Siniestros de Octopus como telón de fondo, este volumen sirve para presentar distintas facetas de nuestro protagonista. En su encuentro con Lobezno y sus mutantes somos testigos de los expeditivos métodos del vigilante y de la reacción de sus camaradas ante lo que es un radical cambio de actitud en su lucha contra el crimen. Unos temas que se abordan también en su encuentro con Thor, motivado por la reaparición de Electro, que busca venganza tras su última pelea contra el Dios del Trueno en Hasta el fin del mundo.
La segunda de las historias tiene un tono más humorístico, obligado con el grupo que conforman la peculiar Fundación Futuro (Scott Lang, Hulka, Miss Cosa y Medusa) y un montón de niños de por medio. En cuanto a la cuarta aventura, la que toma como compañero de viaje a Sonámbulo, puede tomarse como aperitivo de lo que acontece en Spiderman Superior #84. La acción se traslada a la mente del lanzarredes y los enemigos no son otros que sus demonios internos, que saben que algo no termina de cuadrar. Es en esta donde se hace más evidente un tema que está presente a lo largo de ambos tomos, el de la identidad. Porque con todo lo que hemos vivido últimamente (y lo que está por venir), ¿quién es realmente Spiderman?
Con esta pregunta (entendida en su sentido más amplio posible) llegamos a Spiderman Superior #84, de nuevo con Dan Slott al frente en una historia que puede considerarse si no continuación, sí tercer acto de la aventura que ha discurrido entre El Asombroso Spiderman #80 y Spiderman Superior #82. El extraño comportamiento de Peter en los últimos tiempos ha puesto en alerta a Los Vengadores que hacen frente común para intentar ayudar a su arácnido aliado. Al mismo tiempo, nuestro protagonista radicaliza más su postura contra el crimen, lo que le granjea inesperados aliados, y se enfrenta al que puede ser, al menos en un periodo considerable de tiempo, al último envite del Doctor Octopus. Así pues, este cuaderno supone el cierre definitivo de una etapa y se sientan las bases del escenario en el que se va a mover el renovado Peter Parker.
Este último es un detalle importante, porque Dan Slott había dejado un poco aparcada la identidad civil de Spiderman, centrándose en sus aventuras como justiciero. En The Superior Spider-Man #10 USA (la última historia del tomo), se giran las tornas y el protagonismo lo acapara Parker y el rumbo que parece tomar su vida: vuelta a la Universidad para doctorarse, relación con Mary Jane, estrategias para compaginar sus dos vidas, incipientes amoríos… y la aparición de una nueva amenaza que, cocinándose a fuego lento, promete revolucionar la cabecera en los próximos meses.
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