Planeta Cómic no podía haber elegido un momento mejor para publicar este libro sobre el making-of de la serie animada de la Patrulla-X que conquistó a toda una generación en la primera mitad de los años 90 del pasado siglo. No solo en Marvel Comics hubo guiños en forma de miniseries (ya fuera en el contexto de las Secret Wars hickmanianas o por aclamación popular este mismo 2022) o portadas alternativas, sino también en el cine (¡esa sintonía en Doctor Strange en el multiverso de la locura!) y en la TV con el anuncio de la recuperación de la mítica serie en forma de secuela (que llegará en 2023). El público y los autores reclaman a sus X-Men noventeros y la editorial española nos trae el regalo perfecto.

Escrito de primera mano por Eric y Julia Lewald (dos de las figuras más importantes detrás de la serie), el libro hace un exhaustivo repaso por lo que fue la producción. Desde la contextualización del momento (con las dudas de las cadenas de TV norteamericanas respecto a las licencias marvelitas o las propuestas de Stan Lee) a los puntos que marcarían el éxito o fracaso de la serie (la elección de los personajes o la importancia de los créditos iniciales para presentarlos a la audiencia), pasando por un sin fin de imágenes en forma de bocetos, acetatos, storyboards… y hasta un resumen de cada episodio, por si queremos recordar las tramas de la serie, pero no tenemos tiempo (o ganas) de revisionarla. Todo ello, además, con un sinfín de anécdotas y curiosidades en torno a la producción y todo lo que giraba a su alredededor, ya fuera desde los despachos o de necesidades de la propia historia que estaban contando.

El principal valor añadido -o más bien el valor diferencial- de X-Men:Cómo se hizo la serie animada es el tiempo. Cuando hablamos de una película o serie de estreno y se publica un libro de estas características, este suele centrarse casi exclusivamente en mostrar material gráfico en forma de diseños o fotografías y los textos rara vez aportan información relevante. La función de ese tipo de productos es la de acompañar a la serie/película de turno, complementando su estreno. Aquí, sin embargo, hablamos de una serie que finalizó su emisión en 1997. Han pasado 25 años. No hay una necesidad de inmediatez y el acceso a los creadores y el material es mucho mayor. ¿Esto en qué se traduce? En muchísimas imágenes inéditas y declaraciones de muchos de los implicados, que pueden valorar la producción con enorme perspectiva.

Los autores, como parte integral de X-Men: La serie animada, hablan con mucho cariño de la serie (hablan de ella como el mejor trabajo en el que han estado implicados), pero no por ello rehuyen las sombras de la producción y los problemas que tuvieron que afrontar. Como en cualquier otra producción, por otra parte. Se trata de un muy estimable acercamiento no solo a una serie que vuelve a estar de actualidad, sino a una forma de encarar la televisión y la animación que pasó a mejor vida hace mucho. Un pedacito de historia y un regalo imprescindible para cualquier fan mutante que se precie.