Ryan North juega con las expectativas de su público como pocos autores. Después del ojiplático desenlace de Caza sangrienta, lo lógico era pensar que los imaginautas estarían ya buscando el modo de acabar con la renovada amenaza de Doctor Muerte. Y más o menos así es, en la primera página ya tenemos una viñeta de Reed estrujándose la cabeza pensando en posibles soluciones y contramedidas a cualquier maquiavélico plan que se le pueda ocurrir al dirigente latveriano… pero ya está. Hoy Johnny Storm es la estrella.
«Es una amenaza, Johnny. Y tú también, para tu ropa«
Y es la estrella porque asume el rol de narrador, aunque luego la aventura (que continuará en Los 4 Fantásticos #23) sea compartida con el resto del equipo. Y como la práctica totalidad de las aventuras de esta etapa con aroma español (arrancó con Iban Coello como dibujante titular y ahora es Carlos Gómez el encargado de dar vida a los imaginautas), la historia que nos ocupa arranca desde la cotidianeidad para que luego un hecho asombroso e inesperado encienda las voces de alarma y comience la ciencia y la aventura.
Porque, aunque no lo parezca, en las páginas de Los 4 Fantásticos de Ryan North hay mucha ciencia. El ejemplo más cercano lo tenemos en este mismo número, que ofrece una chispa de historia hablando de la partícula Oh-My-God, descubierta a finales de 1991. Solo tenéis que hacer una rápida búsqueda por la red para corroborarlo. Aunque estemos en el campo de la fantasía, estos pequeños aportes dan cierto grado de verosimilitud, en el sentido de que estamos ante una colección que abraza la ciencia ficción (fantástica) -en contraposición a otro tipo de series más en consonancia con lo mágico y esotérico (Doctor Extraño) o los mitos y el folclore (Thor)- y aunque exagerada o inventada, la ciencia debe formar parte de la esencia de la serie y no ser simple palabrería.
La excusa de la partícula OMG lleva a algo todavía más increíble: una invasión «invisible». Viniendo de un evento a escala global (y editorial), pensar en invasiones alienígenas podría no ser la mejor de las ideas. Personajes lamiéndose las heridas, restructuración de todo el skyline… Pero North se las apaña para darle una vuelta de tuerca y hacer algo en consonancia y a escala de la serie. Los 4 Fantásticos son buscadores de lo imposible y aquí tenemos una buena dosis. Ahora bien, ¿a qué se debe esta invasión? Es algo que se resolverá en el próximo número.
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