Que el título del post no os lleve a engaños. Nos han gustado mucho este par de capítulos de Ultimate Spider-Man en los que Peter y Norman se enfrentan a la perversa cacería de Kraven; pero estamos ante un cazador para el que el honor es algo relativo.

 

«La caza nunca termina«

 

Una de las facetas más destacadas de esta aproximación Ultimate de Jonathan Hickman a tropos y personajes tradicionales es que las apariencias rara vez se corresponden a la realidad. Hay un continuo juego entre expectativas y sorpresas, con el guionista (y Marco Checchetto) yendo un paso por delante de nosotros. Así, cuando vimos por primera vez a Kraven y daba una apariencia que se asemejaba mucho a su contrapartida «oficial» debimos empezar a sospechar.

 

Más aún cuando en su primera escena en el capítulo #13 se llena la boca hablando de la pureza de la caza. ¿Por qué? Porque en cuanto tiene la oportunidad se agencia una ametralladora y empieza a gastar munición cual Terminator. ¿Y qué honor hay en disparar derrotado, desde el suelo… por la espalda? Este Kraven es un tipo muy mezquino y deja patente que los cambios en este universo Ultimate no siempre son a mejor… para desgracia de Peter y para nuestro perverso disfrute, porque en el fondo nos gusta ver sufrir al héroe de la misma forma que celebramos cada vez que se levanta y triunfa.

 

 

La estructura mensual de la colección -cada capítulo equivale a un mes- da pie también a interesantes juegos. De una parte lo que venimos viendo hasta ahora, asumiendo diferentes elipsis entre el final de un número y el siguiente. Ha habido también alguna que otra «trampa» acudiendo a flashbacks para rellenar huecos o contar más cosas… y en este par de capítulos tenemos una acción que continua de una entrega a otra. ¿Cómo es posible? Si la acción transcurre de noche y asumimos que un capítulo acaba el 31 de enero y el siguiente arranca el 1 de febrero, ya estaría. Se trata de un truco que permite a los autores dedicarle más tiempo a una misma secuencia. Aunque claro, es algo que es imposible replicar continuamente.

 

¿Y para qué la usan en esta ocasión? Para presentar, ahora sí en condiciones, a Felicia Hardy, quien tiene otro de esos encuentros inesperados que ya son marca de la serie. Es genial la sensación que transmite Ultimate Spider-Man de que todo es familiar y nuevo al mismo tiempo.