Llegamos a julio o, lo que es lo mismo, la séptima entrega de Ultimate Spider-Man, la reinvención hickmaniana del desaparecido universo Ultimate que, en esta nueva iteración, se viste con formas más maduras y oscuras, empezando por el siempre dicharachero Peter Parker, que deja a un lado su vena juvenil por una tez de hombre de familia y look barbudo heredado del también hickmaniano Reed Richards de hace ya casi tres lustros.
«No lo he perdido, solo ha decidido desaparecer«
Presentado en el anterior capítulo, en Ultimate Spider-Man #7 empezamos a conocer a Otto Octavius, otro de los sospechosos habituales en la vida del trepamuros. Aquí, de momento, no parece asomar ningún tentáculo bajo su bata de científico, pero ya de primeras la caracterización que hacen Hickman y Marco Checchetto del personaje nos hace pensar que no es trigo limpio. Un científico obsesionado con el conocimiento, pero sin el ancla de una familia suele acabar muy mal. Y aquí da igual el universo del que hablemos. Veremos, pues, cuanto tarda en mostrar su verdadera cara.
Y lo mismo se puede decir de Harry por algunas de las decisiones que toma en este capítulo. En un universo en el que parece libre de la alargada y tóxica sombra de su padre, el personaje se empeza en boicotearse y dejarse arrastrar a la espiral de locura y destrucción de Norman. De momento no hablamos de nada que haya que tomarse de forma literal, pero no se nos ocurre ningún escenario donde la elección que hace Harry en este número no lleve a la tragedia más absoluta.
Al margen de cómo se va configurando el entorno más próximo a Peter, Ultimate Spider-Man #7 sirve para abrir la serie al mundo. La aparición de héroes como Spiderman viene a desequilibrar el «perfecto» mundo cincelado por el Hacedor, y sus lugartenientes, entre los que se encuentra Wilson Fisk, tienen la misión de acabar con esas disrupciones del plan maestro. Así pues, esta grapa nos permite atisbar parte del escenario general del universo Ultimate, con la aparición estelar de dos de sus figuras más importantes. Quizá sea el momento de echar un vistazo a Ultimate Invasion para recordar cómo está establecido el panorama geopolítico global y comprobar que Harry y Peter tienen mucho más trabajo del que creían cuando se enfundaron sus respectivos trajes.
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