«Esta es mi batalla… La batalla para redimir mis pecados«

Fue allá por 1997 cuando un amigo me enseñó su flamante Play Station y, en ella, un juego en el que podías invocar a dioses, dragones (¡y hasta los Caballeros de la Mesa Redonda!) para que lucharan a tu lado en una épica batalla por el destino del planeta, pero no sería hasta un par de años después que lograría yo hacerme con una copia (para PC) de aquel maravilloso Final Fantasy VII. Hasta que llegara ese momento este amigo me abrió la puerta a un mundo (a un montón de mundos más bien) que no conocía, pero que me atraparía de manera irremediable hasta hoy. Ahora en el salón de mi casa una figurita de Bahamut vigila nuestros pasos desde la estantería sobre la televisión, pero allá en aquellos años las primeras seis entregas de esta maravillosa saga de videojuegos me demostraron que podía haber grandes historias más allá de los libros que consumía con voracidad y de las películas que de cuando en cuando iba a ver al cine. Final Fantasy me enseñó algo que hoy día casi todos sabemos: que en los videojuegos puedes ser el protagonista de grandes y pequeñas aventuras.

Ahora Norma Editorial trae a España el primer volumen de Final Fantasy – Memorial Ultimania, una apabullante, maravillosa, completísima… (se me agolpan los adjetivos) enciclopedia que abarca a estas seis primeras entregas de Final Fantasy (justo antes de su salto de Nintendo a Sony) que viene no sólo a contentar a los más frikis de la saga, sino a sorprender visualmente con una enorme colección de ilustraciones y a servir de gancho y puerta de entrada a una nueva generación de jugadores a una colección de historias que han envejecido como lo hace el buen vino.

«Lucharé… Protegeré a la gente que quiero… ¡y haré de este mundo un lugar mejor!«

Se estructura este enorme libro (trescientas treinta y cinco páginas de nada) de una manera muy simple, yendo de videojuego en videojuego por orden y desgranando el diseño de sus personajes (héroes y villanos) principales, enseñándonos el mundo en el que transcurre la acción, mostrándonos un vistazo de sus enormes bestiarios (a través, de nuevo, de preciosas imágenes conceptuales), recorriendo algunas de sus escenas más memorables y, en algunos juegos en concreto, ilustrando todo el proceso detrás de alguno de sus momentos más recordados (como la famosa y genial ópera del Final Fantasy VI). Esto hace que, teniendo en cuenta la evolución en la complejidad de cada nueva entrega y la enorme relevancia que adquirirían algunas de ellas en particular, el grosor de cada capítulo vaya in crescendo. Porque Final Fantasy – Memorial Ultimania no prescinde de nada y ha preferido ofrecer un producto final más grueso, pero de diseño limpio y atractivo a agolpar información en cada página con el fin de poder abarcarlo todo.

Final Fantasy – Memorial Ultimania: Volumen 1

Es, de hecho, tan bonito este primer volumen que casi parece un libro de ilustraciones más que un enorme compendio de todo lo que ha ido rodeando a cada nueva etapa del largo camino emprendido por la franquicia hace la friolera de treinta y siete años. Lo que comenzó siendo la fantasía final de un estudio a punto de quebrar se ha convertido hoy en uno de los máximos referentes en el mundo del videojuego. Final Fantasy – Memorial Ultimania: Volumen 1 comienza el recorrido (en tres tomos) para reconocer a esta saga por todo lo que nos ha aportado a varias generaciones de jugadores y lo hace con un tomo para quitarse el sombrero. Bravo.