Luna

Luna: Mística sixty

LunaCon la publicación de Luna, Norma Editorial sigue firme en su apuesta de traernos todo el material posible de María Llovet (Faithless, Panini Cómics, se les escapó), demostrando que es una de sus autoras predilectas. Y no es para menos. Pocas artistas hay con tanta personalidad en nuestro mercado y merecen ser cuidadas.

 

«¿Qué hacer cuando tu otra mitad decide dejar de existir?»

 

En Luna, Llovet no se aleja de lugares que ya ha explorado en otras obras, ya fuera como autora completa o como dibujante. Así, es fácil pensar en propuestas como la citada Faithless o en There’s Nothing There durante los primeros compases de la obra. Una chica joven seducida por una magnética figura y un mundo de sensaciones en el que lo real trasciende de lo puramente palpable con nuestras manos. Y secretos. Muchos secretos. A partir de ahí, sin embargo, Luna sabe encontrar su propio espacio apostando por un relato más onírico y sugestivo.

 

La época (finales de los 60) y el escenario (un desierto, que bien podría ser el de Black Rock, en Nevada) marcan sobremanera el tono y la energía que destila una aventura tremendamente pasional, que se mueve en torno a los deseos y las adicciones, trágicas y liberadoras; así como profundamente mística, desde la catártica y y cargada de revelaciones personales a la fabricada por los falsos profetas. Llovet nos muestra los dos caminos junto a sus peligros, pero nos invita a recorrer el camino con la mente abierta, como su protagonista Teresa. Experimentamos y descubrimos a través de ella.

 

Luna

 

El gran pero de esta edición en tapa dura (por ponerle alguno), es que dada la encuadernación que tiene es imposible disfrutar de las dos dobles páginas que nos regala Llovet tal como fueron concebidas. Por más que se abra el tomo de par en par, la línea de corte de las páginas nos impide ver las ilustraciones como lo haríamos en la grapa original que se publicó en EEUU. A cambio, el tomo trae como complemento seis páginas que recogen diversos diseños de personajes, así como las ilustraciones que sirvieron de portada para la edición norteamericana del cómic.

Acerca de Daniel Lobato

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El padre de todos, pero como a Odín, se me suben constantemente a las barbas. Periodista de vocación cinéfila empecé en deportes (que tiene mucho de película) y ahora dejo semillitas en distintos medios online hablando de cine y cómics. También foteo de cuando en cuando y preparo proyectos audiovisuales.

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