«Puede que sea un tipo sospechoso, pero también está como un queso«
Tras la mala experiencia que me supuso Juliana y la Fruta Dorada, decidí darle una segunda oportunidad al manga TL (Teen’s Love: manga de alto contenido erótico y sexual dirigido a un público femenino) con Unidos por el Shoujo: La Calenturienta Historia de dos Inexpertos. ¿Motivos? Que siempre hay que dar un segundo bocado antes de descartar del todo algo que no nos ha gustado y que tanto la sinopsis que nos facilitó Odaiba Ediciones como el concepto de ‘dos inexpertos’ resultaron ser un anzuelo demasiado jugoso como para no picar mi curiosidad por el primer manga de esta temática de la autora japonesa Nitako. Ella, una oficinista sin más que trata a duras penas de llegar a fin de mes mientras ahorra para mudarse a un mejor piso, no tiene relaciones románticas ni las busca: está centrada en su objetivo. Él, un empresario de éxito joven y despampanante que… teme a las mujeres que tratan de aprovecharse de su fortuna y basa sus conocimientos amorosos en lo que ha leído en los mangas shōjo.
El gran éxito que, para un servidor, tiene Unidos por el Shoujo parte de la excelente química entre los protagonistas (la naturalidad de Rin y la ternura de Kento funcionan a la perfección juntas) para afianzarse en una estupendo uso del humor y un paso por las escenas más picantes que se antoja natural y orgánico con la trama. No he podido evitar comparar la relación entre estos dos tortolitos con la que tengo con mi mujer a día de hoy y con la manera en que éramos cuando comenzamos a salir juntos. Y no, no soy ni un empresario de éxito ni un joven efebo, pero Nitako captura la urgencia, la necesidad el uno del otro y la alegría cada vez que nos encontrábamos a la perfección. Es muy fácil empatizar con los personajes de este manga, y eso significa que la mitad del trabajo está hecho antes de que uno se centre en la historia en sí.
«Ni de coña vienes a mi casa ahora«
La trama de Unidos por el Shoujo no es nada del otro jueves en tanto a que nos ofrece un retrato más bien costumbrista de los personajes sin tratar de meterse en demasiadas fantasías más allá del encontronazo inicial entre los protagonistas que, en mi opinión, es la parte más débil del argumento (todo ese capítulo roza una vez más temas como el del secuestro y el abuso que no terminan de encajarme). Este manga se disfruta dentro de la tranquilidad de su historia: un encuentro en la oficina, una visita a la casa de Rin, las ganas de Kento por tachar cosas de su lista de deseos románticos (como llevar pijamas a juego, sin ir más lejos). El sexo está ahí, pero como parte de la relación normal entre dos personas adultas, no como el extraño poder de una mujer que te va a curar a polvos.
Me ha gustado tanto Unidos por el Shoujo que la reseña se ha escrito prácticamente sola y, de hecho, no me importaría seguir leyendo más sobre estos personajes más allá de los primeros días de su relación (la aparición, cerca del final, del hermano de Kento es una adición fantástica y muy poco aprovechada). El manga TL se ha redimido hoy ante este humilde redactor a través de una historia que sólo se puede calificar como adorable.
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