«¡Loki es el malo!«

¿Os preguntábais desde el número #1 de esta colección de dónde venía esta copia reducida de Loki? Kieron Gillen se espera hasta la cuarta entrega de la serie con la que pretende jugar con las reglas no escritas del mundo de los cómics para mostrarnos cómo el nuevo y flamante Superior Spiderman no es tan nuevo, ni tan flamante, y que los problemas con las almas de nuestros enemigos asesinados van más allá de Nueva York y se replican en las tierras de Asgard.

La cuarta entrega de Jóvenes Vengadores pone fin al primer arco argumental con un capítulo bastante más convencional que los anteriores y que, por fin, pone las cartas sobre la mesa y deja que conozcamos las motivaciones de cada joven héroe (que van desde el calentón de una noche de verano hasta la recuperación del status perdido) ahora que están obligados a permanecer juntos. Sin embargo, resulta un tanto perturbador que la meta común de este equipo sea la de poder tomar caminos separados. ¿Qué pasará cuando derroten a Madre? ¿Cómo demonios funciona el hechizo y a quién afecta realmente? Es de preveer que las medias verdades de Loki serán las precursoras de las tramas consiguientes, hasta que Wiccan, Hulkling y los demás se acepten a sí mismos como los héroes que son. Con las responsabilidades que ello conlleva.

«Los caracoles nunca lo entienden«

Mucho más interesante es el número de septiembre de la colección. En Jóvenes Vengadores #5 vemos de nuevo a Veloz y a Prodigio (el hombre-X que tanto nos recuerda a Peter Petrelli) y nos enteramos de cómo han ido sus vidas desde que el supergrupo que rescató a la Bruja Escarlata decidió disolverse y desde que el Cisma mutante acabó con las ilusiones del inteligente David Alleyne. Descubrimos que ambos trabajan a tiempo parcial para ganarse la vida utilizando sus habilidades para tareas de lo más mundano (si es que a regentar una línea de ayuda al héroe se puede considerar mundano) y comprobamos que Gillen puede ser bastante simpático cuando se lo propone. El Peaje, como se titula este quinto capítulo, es una historia bastante divertida sobre personas haciendo todo lo contrario a lo que sus destinos les dictan.

Además, este cortometraje comiquero abre una nueva trama repleta de interrogantes (justo lo que demandaba esta colección) y retoma, con la ayuda temporal de una estupenda Kate Brown, la experimentación con el formato de las viñetas que ha caracterizado a Jóvenes Vengadores desde su primer número en Marvel Now! No comentaré mucho más para no destripar nada, pero los diálogos de este número son los más gratificantes de los cinco que se han publicado hasta la fecha en España. Veloz siempre fue el más «maduro» de los dos «hijos» de Wanda y en su manera de desenvolverse podemos leer que ya se ha despejado de todas las dudas que asolan al resto de protagonistas de estos cómics. Prodigio, por su parte, puede ser una adición muy interesante al grupo dado su carácter de enciclopedia viviente que, además, es capaz de luchar si la ocasión lo requiere.

Una reflexión final extraída directamente del «Al Salir de Clase» que escribe Julián M. Clemente: Desde mi punto de vista, nunca llegaremos a la normalización de la orientación sexual si nos empeñamos en tratar de hacernos los progres dándole todo el bombo que creemos que merece. Con quién escoja cada uno acostarse es algo personal y privado, el hecho de que Wiccan y Hulkling sean pareja debería ser una nota a pie de página y no el motivo de extensas editoriales. Pero qué sabré yo…