Panini Manga presenta el segundo volumen de Eden: It’s an Endless World! del mangaka Hiroki Endo. Un segundo volumen que a nivel argumental cierra el arco de presentación de su historia y que refrenda nuestra impresión inicial respecto a las intenciones de la obra: La aventura y la crítica sociopolítica son la faceta predominante de un relato sobre el día después del fin del mundo. Quizás esa sea la clave de porqué el aspecto más teórico y espiritual respecto a la condición humana esté en un segundo plano. Eden es una historia sobre los sobrevivientes y el páramo en el que viven.

«Tenemos al mundo entero en nuestra contra«

Las diferentes facciones presentes en el relato (Nomad, Propater…) luchan por los restos del antiguo mundo para imponer su visión del nuevo. La brutal enfermedad presentada en el primer tomo que desoló el mundo no solo no consiguió unir a la humanidad, sino que recrudeció nuestros comportamientos más viles y egoístas. Como el covid, pero a lo bestia, apoyándose en la manga ancha que proporciona la ficción. Porque, ¿hemos mejorado algo tras la pandemia? ¿O somos una sociedad aún más desquiciada?

A diferencia del primer volumen, aquí ya no vemos nada de la situación global en el fin del mundo. Sí, retrocedemos en el tiempo, pero solo unos años atrás del tiempo presente de la historia, lo suficiente para conocer más acerca de algunos de los personajes protagonistas. Pero lo que importa es la lucha actual. Y así, la mitad del tomo se resume en ver cómo se desarrolla y finaliza la cruenta batalla en las ruinas de Perú. Algunas de las imágenes son duras y crueles. La guerra lo es.

Y esa mirada al pasado reciente de los personajes no es menos desesperanzada, sino que reafirma la idea de que la tragedia solo engendra vileza. Y en ese páramo que es el mundo de Edén, los sobrevivientes son buitres que pelean por unos míseros huesos, pues el virus no solo mostró lo débil que era el ser humano, sino que acabó con su esperanza.