En esta ocasión arrancamos con lo que acontece en Los Vengadores #44, pues la historia que se narra en sus páginas, el “descubrimiento” por parte del Capitán América de que sus amigos han jugueteado con su mente borrándole algunos comprometidos recuerdos, se revela en este número como anterior al cruce que tiene lugar en las páginas de Los Nuevos Vengadores #43 entre la Gran Sociedad y los Illuminati. El pecado original que ocupa las atenciones de los héroes más poderosos de La Tierra es previo a lo que se verá en esta y las próximas entregas de Los Nuevos Vengadores, que hacen algunas alusiones al respecto de forma bastante explícita.

De aquí sacamos dos conclusiones, 1) que Jonathan Hickman ve las dos cabeceras principales de Los Vengadores como una unidad indivisible, con lo que se hace imprescindible seguir ambas colecciones para no perder detalle, y 2) que los Illuminati saldrán victoriosos de su envite contra la versión marca blanca de La Liga de la Justicia que se ha inventado el guionista y a la que ha llamado la Gran Sociedad.

En Los Vengadores #44 la acción arranca justo donde la dejó el número anterior… casi 50 años en el futuro. Nuestra extrañeza como lectores es compartida por Capitán América y sus compañeros, lo que hace más interesante la aventura al estar al mismo nivel que los personajes y descubrir los secretos que esconde el guionista bajo la manga al mismo tiempo que ellos. La corriente del espacio-tiempo está completamente desquiciada y pocos autores no han tocado el tema, con Hickman a la cabeza, obviamente. Pero aquí va un paso más allá planteando diferentes saltos que presentan unos hipotéticos futuros que bien podrían ser hacia los que nos encaminamos (con un Ojo de Halcón avejentado y la presencia de la nueva Thor), o simples posibilidades que solo tendrán cabida en universos alternativos si nuestros héroes logran salvar la situación. Conociendo a Hickman no podemos dar nada por sentado, más aún teniendo en cuenta que el tercer y último acto de su gran aventura al frente de Los Vengadores dará comienzo (aquí en España) en 2015, año en el que Ultrón se hará mundialmente conocido entre el público alejado de las viñetas.

Respecto a la grapa que anuncia el título, Los Nuevos Vengadores #43, esta, por fin, pone frente a frente a los Illuminati, encabezados por Reed Richards y Tony Stark, con los defensores de otra Tierra paralela que se va a dar de bruces con la nuestra por culpa de las endiabladas incursiones. Ambos grupos mantienen una sombría conversación en la que muestran sus cartas (como las bombas que han ido construyendo nuestros héroes para acabar con otros planetas, o que han estado espiándoles durante algún tiempo), y el diferente enfoque de la situación que hace cada uno. Mientras que la Gran Sociedad enarbola la bandera de la esperanza y muestran unos férreos valores que harían llorar de emoción a Capitán América, Iron Man y compañía parecen haber perdido todo rastro de la ingenuidad de sus “rivales”. Se mueven en un gris casi negro, conscientes de que, salvo milagro, tendrán que aferrarse a acciones desesperadas para salvar La Tierra.

De esta forma, mientras que la próxima entrega de Los Vengadores promete seguir explorando el qué podrá deparar el futuro a nuestros héroes, Los Nuevos Vengadores nos ofrecerán una buena dosis de acción.