«Luego iré a Krakoa y arrojaré a tu titiritero al volcán«

Interesante y potente último número de la Patrulla-X de Gerry Duggan antes de llegar a la Gala del Fuego Infernal de 2022. Nos habíamos dejado en el número anterior a las mujeres X reventando la banca del casino espacial de Mundojuego mientras que Cíclope y Sincro trataban de descubrir la identidad secreta del Dr. Estasis, uno de los miembros de Orchis que le han estado poniéndole las cosas difíciles a toda la gente de Krakoa desde el principio de Amanecer de X. La trama de estos dos últimos nos llevaba al descubrimiento de un nuevo Míster Siniestro sin diamante en la cabeza que, ya en este número, proclama ser el Siniestro original, sin genes mutantes y con un férreo odio hacia los integrantes de esta evolución del ser humano. Las consecuencias de esta revelación habrán de esperar, así que por ahora sólo podemos elucubrar con que sea verdad (y cierto personaje de Krakoa deba dar muchas explicaciones) o que no lo sea (y que el mismo personaje decida ‘limpiar’ las copias corruptas). Ciertas imágenes que nos llegan de Norteamérica nos hacen pensar que cualquiera de estas dos opciones va a traer mucha más cola de la que pensábamos.

Por su lado, la aventura espacial de Jean Grey, Lobezna, Polaris y Pícara se desarrolla sin complicados giros de guión para cerrar una trama que, sinceramente, poco más podía aportar ya. Casi da la impresión de que esta trama sea poco más que una simple excusa para mantener a esta parte del elenco ocupada mientras las cosas importantes de verdad ocurren a miles de millones de kilómetros en la Tierra. de ser así lo cierto es que me da un poco de pena, porque se dilapida la última trama antes de la Gala con una aventura ciertamente menor y sin haber explorado infinidad de temas que ahora (con una posible renovación en la plantilla en el aire) puede que se queden para siempre en el tintero.

«No tenemos por qué cambiar toda la alineación«

Y es que es en la Tierra donde pasa de verdad lo importante. Y no me refiero únicamente a todo el tema con Estasis (que ya veremos hacia dónde nos lleva y que aquí apenas ocupa un par de páginas), sino al golpe de mano que se saca Duggan de la chistera al adelantarse a cualquiera de los que amenazan con hacer públicos los secretos mutantes y dejar al descubierto el mayor de sus misterios (mandando definitivamente al carajo la tontería esa del Capitán Krakoa por el camino). Como bien dice Julián Clemente al final de la entrega de este mes de Panini, es en la escena de la cafetería donde vemos lo más importante y guay de este número y es a partir de ella de donde van a venir las cosas más potentes para los mutantes a corto y medio plazo.

Patrulla-X #12 (#131): Destino de X

Sea como fuere, a lo largo de todo este cómic se incide una y otra vez en el tomo que va a cerrar las novedades mutantes de este mes. En la anterior Gala los mutantes terraformaron Marte y se lo regalaron a sus primos de Arakko (resolviendo de paso sus tiranteces con estos últimos y evitando que su belicismo les llevara a tratar de conquistar la Tierra). En esta todo apunta a que la revelación de la inmortalidad mutante va a jugar un papel crucial y a que su cierre no será para nada tan espectacular como lo fue el de la anterior, sino que gente como Orchis tratará de llevarse las ovaciones finales antes de que empiece un año que se promete muy difícil para los habitantes de Krakoa.