Con esta doble entrega de Ultimate Spider-Man (los capítulos #5 y #6) damos por finalizado el arco inaugural de la reimaginación del trepamuros ideada por Jonathan Hickman en este nuevo Universo Ultimate en el que cualquier parecido con la «realidad» es pura casualidad. Las reglas están por escribir y las enseñanzas por aprender.

«Hace años que quería jugar con uno«

Esto se aplica incluso a los mantras que hemos interiorizado durante años (¡décadas!). El caso más paradigmático es el de «todo gran poder conlleva una gran responsabilidad» del que Peter Parker siempre ha hecho bandera. Aquí Hickman establece un pequeño, pero interesantísimo, matiz. La responsabilidad no llega por el poder, sino por el conocimiento.

Tony Stark le descubrió a Peter la verdad de un futuro que le había sido robado: había nacido para ser un héroe, para ser Spiderman. Casado con la mujer de su vida y con dos hijos, Peter creció y maduró como fotógrafo de prensa, sin el poder aparejado a Spiderman, ni su responsabilidad. El sueño recurrente del Peter tradicional de cómo habría sido su vida si aquella araña no le hubiera picado tiene en la serie de Hickman una respuesta absoluta.

Pero una vez que Tony le dio el conocimiento a Peter, surgió el dilema. Porque otra constante -esta sí es absoluta- es que el conocimiento tiene un precio. Peter supo que estaba destinado a ser un héroe y que el mundo en el que vive está construido en base a mentiras. Pero Tony no le dio solo ese conocimiento, sino la posibilidad de usarlo, la posibilidad de convertirse en Spiderman. Es decir, en este universo Ultimate Peter no se convirtió en Spiderman tras adquirir sus poderes y desoír la responsabilidad en un primer momento. En este universo, Peter se convierte en Spiderman porque sabe que debe hacerlo. El conocimiento implica responsabilidad.

«Tu asesino me lo dijo«

¿Lo más irónico y que a su vez reafirma esta idea? Que Harry Osborn se convierte en el Duende Verde por la misma razón: el conocimiento de la verdad oculta del mundo le impele a asumir la responsabilidad de destruir el velo de mentiras.

Ultimate Spider-Man #6 hace una pequeña trampa respecto a la que viene siendo la estructura de la serie (cada capítulo abarca un mes «en tiempo real» en la vida de Peter como Spiderman) para hacer un recorrido en el tiempo desde el arranque de Ultimate Invasion hasta este Ultimate Spider-Man #5 contando la trayectoria de Harry. Desde cuál era su lugar en el mundo diseñado por el Hacedor, hasta cómo descubre la mentira y sus primeros pasos como el Duende.

En esta entrega el guionista (acompañado por David Messina, como en el número anterior) cuenta la historia de Harry, pone a la par el relato de su historia con la de Peter y, en cierta forma, establece algunos paralelismos con la de éste, remarcando una nada sutil diferencia: mientras Parker muestra muchas reticencias a saltarse las leyes, Osborn está dispuesto a ensuciarse las manos hasta donde haga falta. Esto plantea una interesante cuestión a medio-largo plazo. ¿Conseguirán ambos personajes cimentar una relación de confianza y colaboración duradera? ¿O las diferencias se irán acrecentando hasta el punto de que Harry encare un viaje hacia el lado villanesco de la historia?

Y tras aprovechar para presentar a algún que otro personaje de largo recorrido en la continuidad tradicional, llegamos a Ultimate Spider-Man #6, con el primer cara a cara con el gran villano de esta incipiente etapa (que no es otro que Wilson Fisk) y la culminación de la creación del héroe. Esto es, la oficialización de Spiderman como su nombre de batalla.