Curioso relato el que nos trae ECC Ediciones protagonizado por Superman. Escrito por Christopher Priest y dibujado por Carlo Pagulayan, el cómic nos presenta a un Clark Kent perdido, literal y figuradamente, después de que una misión junto a la Liga de la Justicia se resolviera con unas consecuencias imprevistas.
Sin salirnos de las notas que da la sinopsis escrita en la contraportada del tomo, Superman regresa con Lois después de 20 años, aunque para ella solo han pasado unas horas. Así, el centro de interés de la obra consiste en explicar esa odisea de 20 años del hombre de acero y en derribar la barrera que dicha odisea causa en la pareja. Porque si Clark de repente carga con una mochila de 20 años de experiencias alejado de su hogar, Lois asume esa misma mochila y le añade el peso de una incomprensión que le impide recuperar a su marido.
Superman: Perdido es un cómic de enormes ambiciones, sobre todo a nivel de desarrollo de personajes que termina perdiéndose en un revoltijo de paradojas y trampas temporales que hacen de menos su llamativa premisa. La historia es entretenida y genera interés, pero a partir de cierto punto Priest no para de dar con callejones sin salida que le obligan a dar continuos cambios de rumbo que no hacen sino alejarnos de la idea original. La sensación que le queda al lector es la de una marcada improvisación en el desarrollo de la historia.
Una historia que apunta muchas ideas y tramas interesantes (como el reflejo de la historia de Kara [Sueprgirl]), pero que va abandonando o resolviendo como puede -o porque sí- a medida que el tiempo (las páginas restantes) se va agotando. La misma puesta en escena se puede interpretar así. El relato espacial de Clark arranca como una suerte diario de viaje como los de Gulliver, conociendo diferentes seres y civilizaciones, «disfrutando» de los encuentros mientras sigue el rumbo a casa. Luego muta en una suerte de Ulises cuyo deseo de retornar al hogar lo inunda todo. Pero el viaje se detiene y antes de darnos cuenta aparecen sospechosos habituales como Lex Luthor, ¿por qué? Priest responde ¿y por qué no?
Superman: Perdido es un buen ejemplo de historia que va de más a menos. Su premisa genera grandes expectativas que finalmente no se materializan. Con todo, como decíamos, es una lectura entretenida. Propone algunas escenas y dinámicas (como la de Lex y Lois) bastante emocionantes y sabe captar los caracteres de los principales personajes. Pero cuando haya que hacer listas de grandes historias del hombre de acero, difícilmente habrá quien se acuerde de este cómic, que quedará como una de tantas anécdotas del superhéroe.
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