El tamarismo fue un fenómeno tan revolucionario como efímero que captó la atención de todo el país a principios de los 2000. Un grupo de pintorescos personajes que conquistaron la escena mainstream sin perder su genuino espíritu underground. Un cuarto de siglo después Nacho Vigalondo encabeza un proyecto que reivindica el tamarismo y a sus protagonistas desde una mirada tremendamente humana y mágica.

Con motivo de su estreno Vigalondo nos abre las puertas de su casa (vía online) para hablar de Superstar, sus grandes personajes y la personalidad que destila la serie que, en palabras del director cántabro, contiene su mejor trabajo hasta la fecha.

Sinopsis: Con el cambio de siglo, un cometa cruzó el cielo de España, rompiendo las leyes de la fama y el éxito, y difuminando la línea que separaba lo popular de lo ‘underground’. Durante unos años, las únicas caras que aparecían en las portadas de las revistas y en los programas de televisión de máxima audiencia eran las de famosos que parecían sacados de otra dimensión. Criaturas que hasta entonces habían estado condenadas a la burla y al desprecio y que acapararon nuestra atención sin adaptarse a ninguna normalidad. Un relato mágico donde caben conspiraciones esotéricas, noches eternas, ladrillos cuánticos, supervillanos multicolores y una improbabilidad hecha estrella: Tamara.

Compuesta por seis episodios de unos 50 minutos de duración cada uno, la miniserie Superstar puede verse en Netflix desde el 18 de julio. Está escrita por Nacho Vigalondo, María Bastarós, Paco Bezerra y Claudia Costafreda (quien además co-dirige la serie). La producción corre a cargo de Suma Content y cuenta con Javier Ambrossi y Javier Calvo (Paquita Salas, La Mesías) como productores.