Informamos hace un par de meses acerca de la buena nueva y ya es una realidad. Con este primer tomo de Los 4 Fantásticos arranca oficialmente la Biblioteca Marvel de Panini Cómics. Una iniciativa con la que la editorial pretende recuperar (y popularizar) la historia del Universo Marvel desde sus orígenes -con este volumen como punto de arranque- hasta la década de los noventa del siglo XX; siempre, claro está, que las ventas acompañen y el plan editorial siga su curso esperado.

«¡Pero es! ¡Es él! Es… ¡Es Namor!»

Para empezar, como decíamos, el autodenominado mejor cómic del mundo por parte de uno de sus autores, el mítico Stan Lee, quien el 28 de diciembre (día de salida de esta iniciativa) habría cumplido cien años. De hecho Panini Cómics, a modo de curiosidad, ha elegido como artículo para el prólogo un texto del propio Lee de 1987 en el que explica, entre otras cuestiones, el origen de esa frase que ha acompañado a los imaginatuas desde -casi- su nacimiento: ¡¡El mejor cómic del mundo!!

Más allá de la emoción de reencontrarse con estos personajes en su más tierna «infancia» y a un precio asequible (habría que comparar con los Marvel Gold / Héroes para comprobar si realmente saldría a cuenta), seamos honestos… la lectura es difícil. La nostalgia debe combatir contra tramas sencillas, diálogos y textos sobreexplicativos o redundantes y 60 años de cambios sociales. Esto se traduce en que la lectura debe abordarse de forma más calmada y siendo conscientes de que el frenetismo de la Marvel actual nada tiene que ver con los modos de los primeros años de aventuras de nuestros personajes. Esto no las hace peores o mejores lecturas, sino que requiere ser conscientes del contexto en el que se concibieron para disfrutarlas como merecen.

Y para esto mismo sirve la nutrida selección de extras que incluye el tomo, que van desde irresistibles bocetos e ilustraciones originales, a textos de obligada lectura de Stan Lee, Tom DeFalco o gente de la casa como Julián Clemente. Esta Biblioteca Marvel que recién arranca no es solo una oportunidad para conocer el principio del viaje a lo imposible de Los 4 Fantásticos, sino un modo perfecto para conocer el medio y descubrir de primera mano la evolución histórica del mismo. Así, es más que un cómic para muy cafeteros. Ofrece suficientes herramientas y alicientes para adentrarse en la vida de la familia Richards y, con suerte, quedarse con ellos para vivir los centenares de aventuras que no han hecho más que empezar.

Este primer volumen, por ejemplo, que recoge los cinco primeros números de la colección, nos presenta a personajes como Namor, Doctor Muerte, a los infames skrulls o narra el trágico y asombroso día que les cambió la vida para siempre. ¿Quién querría perderse una colección que arranca así?